Ignacio Arteaga Garcés cronica@australosorno.cl

La bohemia osornina, que antaño estaba concentrada en las calles del centro tradicional de Osorno, en torno a la plaza, hoy está dispersa por diversas calles antiguas residenciales y nuevos barrios. En calle Conrado Amthauer, el sector de Las Quemas y avenida Francia se pueden encontrar distintos locales que ofrecen música, diversidad en gastronomía y tragos.

En Amthauer, específicamente, hay al menos ocho pubs, por lo que se ha transformado en un nuevo barrio bohemio donde los jóvenes y adultos se trasladan para compartir una copa.

Según explican los dueños o administradores de los pubs, han decidido experimentar en otros puntos de la ciudad, mayormente por la inseguridad que hay en el centro de Osorno, a diferencia de la tranquilidad que tienen en sus ubicaciones actuales.

"La gente está arrancando del centro por la falta de estacionamientos, por el peligro que existe para ellos mismos y sus autos. Además, Osorno se ha expandido y las propuestas gastronómicas que están en el centro son muy antiguas. Lo que está no es para el perfil de la gente que viene a este sector. Entonces, el público se está quedando en Amthauer o viene para acabar en los locales del Plaza Bühler", explicó Gustavo Cárdenas, administrador del Manhattan Coffee Bar.

Hace unos días, a través de este medio, el empresario gastronómico de Osorno y dirigente del gremio, Horacio Kauak, se refirió al cierre del pub Mala Fama, que estaba ubicado en calle Mackenna, debido a la inseguridad que reina en el centro de Osorno. "Permanecer en el centro a la media noche es un riesgo increíble. No estamos dispuestos a ello", manifestó.

Cambio de mentalidad

La administradora del Pub Pistacho, que lleva 12 años ubicado en calle Guillermo Bühler, en el sector de Las Quemas, comentó que el negocio creció para el denominado "estallido social", donde el centro de Osorno fue foco de las manifestaciones violentas, por lo que la gente buscó alternativas para compartir con más seguridad.

"Los locales del centro cerraban temprano para el 'estallido', entonces la gente se trasladó hasta el Pistacho, porque estaba lejos del centro y no era peligroso", indicó.

Si bien en el centro de la ciudad aún quedan varios pubs, cada vez son menos, ya que los dueños de los locales priorizan la tranquilidad de sus clientes y la propia.

"El centro hoy está más peligroso. Si te pones a pensar en la plaza de noche, ha habido robos de autos y asaltos. Entonces, lo que nosotros queríamos era un local para gente adulta de 30 años que se quiere tomar un trago después del trabajo. Un lugar tranquilo, sin pensar que te van a romper el vidrio del auto, que andarán personas ebrias en la calle o que el barrio está sucio", señaló Makarena Zumelzo, dueña de Capadocia, local ubicado en Amthauer con Cochrane.

"Los comentarios de los clientes es que el centro es inseguro en la noche, por ejemplo, dejar un vehículo con una chaqueta o cosas así o que está un poco oscuro. Eso es lo que más he escuchado de los clientes. Acá ello no se da, es más tranquilo como digo yo", manifestó Eduardo Cárdenas, administrador del Terrazú, ubicado en el strip center de calle Guillermo Bühler.

Una opinión similar tiene Orla Arismendi, subgerente de Bar Histórico, situado en la calle Amthauer. "Acá hay mayor seguridad, yo no voy ahora a la avenida Portales, la verdad que no voy hace mucho rato, mucho tiempo, pero yo sé que en la noche igual hay vida nocturna y es un poco más peligroso por los mismos afters. Se ha vuelto más riesgoso transitar de noche", expuso.

Y agregó que "la gente sabe que es un barrio calmado, que no sucederá nada malo a pesar de la hora".

Marlín Méndez, administradora del María Bonita (en calle Amthauer, entre Cochrane y Matta) explicó que el local tiene 5 años de existencia y se ubica en un barrio más tranquilo.

"El dueño antes tenía otro local un poco más pequeño en el casino, pero se trasladó por la ubicación y tranquilidad", dijo.

"Prefiero venir a Amthauer por la tranquilidad que genera el sector, porque como son bares y no discotecas, cambia mucho como las personas, el ambiente, el contexto en general", explicó Diego Morales, cliente de pubs.

"Es distinto estar acá en Las Quemas a la una de la mañana que en el centro de la ciudad, aquí hay mayor tranquilidad y no me preocupo de la hora", dijo Sebastián Herrera, cliente de pubs.

"Acá no pasa nada. No ha habido ningún problema. No sé si será porque a estos bares viene gente más acomodada", explicó Olga Santana, quien trabaja en el sector.