La Organización Mundial de la Salud declaró al 4 de marzo como Día Mundial de la Obesidad, con el fin de que la población de todas las naciones tome conciencia respecto de esta enfermedad que afecta a millones de personas, y que ha sido considerada como la nueva pandemia. Las cifras cada vez son más alarmantes, ya que según las proyecciones, en el año 2035 una de cada cuatro personas la padecerán. A la vez, la obesidad infantil aumentará en un 100% entre 2020 y 2035 en todo el mundo.
Diversos estudios posicionan a Chile en lo más alto de los rankings. De acuerdo a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (Ocde), el 67,7% de la población mayor de 15 años sufre sobrepeso u obesidad, lo que sitúa al país en el tercer lugar, después de México y Estados Unidos. A la vez, un estudio de la Universidad de Oxford señala que Chile alcanza la posición 34 de los países con mayor obesidad y sobrepeso del mundo, llegando casi a doblar el porcentaje de promedio en todo el planeta (38,9%).
El Mapa Nutricional que elabora la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb) reveló que uno de cada cuatro escolares chilenos presenta obesidad, y de ellos, el 7,5% padece obesidad severa. Si a eso se suma que el 28,7% tiene sobrepeso, los niños y adolescentes que están sobre su peso normal son más de la mitad (54,1%).
La obesidad y el sobrepeso se han transformado en un problema de salud en Chile, que se acentúa cada año como resultado, en parte, de los hábitos de vida sedentarios, que incluyen poca actividad física y dietas alimenticias sobrecargadas en calorías. Tal vez está ligado a la conducta y al crecimiento que vivió el país desde la década del '90, que abrió una nueva forma de vida a las familias, un estilo en que el sedentarismo y el consumo de la llamada comida chatarra han sido detonantes.
Chile ocupa el primer lugar en América Latina en obesidad infantil y sexto en el mundo. En consecuencia, cada vez aparecen a más temprana edad enfermedades que eran de adultos, como la diabetes, la hipertensión y los problemas cardíacos. Las familias han cambiado sus hábitos de alimentación y en algunos casos se ha aumentado el consumo de alimentos muy procesados.
El ataque a lo que se considera la otra pandemia de estos tiempos debe hacerse de modo multidisciplinaria para que cumpla con su objetivo y ayude a los chilenos a comer en forma saludable.