El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aterrizó ayer en Washington, Estados Unidos, con motivo de su visita oficial en la cual hoy se reunirá con el Presidente Donald Trump, convirtiéndose de esta forma en el primer mandatario extranjero en que recibe el líder republicano en su segundo mandato. Uno de los temas claves será la tregua entre Israel y Palestina, aunque Trump afirmó ayer que "no tengo garantías de que la paz vaya a mantenerse".
"No hay garantías de que se mantenga. He visto a personas brutalizadas como nunca antes. Nadie ha visto algo así", dijo el Mandatario sobre el alto al fuego en la Franja de Gaza.
"Israel ciertamente es un país pequeño en términos de territorio", agregó Trump y comparó su tamaño con su "maravilloso bolígrafo", mientras que Oriente Medio, explicó, tendría en comparación la extensión de su escritorio.
El enviado para Oriente Medio de la Casa Blanca, Steve Witkoff, señalado como figura clave del acuerdo de alto el fuego alcanzado entre Israel y Hamás, señaló después que "se mantiene hasta ahora, y ciertamente tenemos esperanza, y esa es la orden del Presidente: sacar a los rehenes, salvar vidas y llegar, con suerte, a una resolución pacífica de todo esto".
Se espera que los jefes de Estado hoy conversen acerca de la segunda fase del acuerdo de tregua, durante la cual está prevista la liberación de todos los rehenes israelíes, junto con establecerse las bases del final definitivo de la guerra.
Según la prensa israelí, Trump le habría señalado a Netanyahu que no quiere que Israel vuelva a combatir en la Franja. Sin embargo, algunos miembros claves de la coalición gobernante, como el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, avisaron que están dispuestos a derrocar al Gobierno si Netanyahu no retoma los combates en la Franja una vez termine la primera fase de la tregua.
Junto al gobernante israelí, viajaron a Washington el titular de Asuntos Estratégicos, Ron Dermer, y el enlace gubernamental con las familias de los rehenes, Gal Hirsch, entre otras autoridades.
En declaraciones a los medios de comunicación antes de subir al avión, Netanyahu sostuvo que la guerra ha servido para "cambiar la faz de Oriente Medio" y, junto a EE.UU., Israel puede cambiarla "todavía más, y para mejor".
Netanyahu es probablemente el líder israelí que más veces ha visitado oficialmente Washington: esta será la decimocuarta ocasión en que se alojará en la Blair House, reservada a los dignatarios extranjeros.
Agenda hasta el sábado
El premier israelí extendió hasta el sábado su viaje a Washington, debido a la cantidad de reuniones solicitadas por funcionarios estadounidenses, pese a que estaba previsto que el Mandatario regresara a Israel el jueves, a tiempo para el quinto canje de rehenes de aquel país en Gaza, que se prevé para el sábado.
Netanyahu comenzó su itinerario ayer, al juntarse con el enviado de Trump a Oriente Medio, Steve Witkoff, a fin de iniciar las negociaciones para la segunda fase de la tregua con Hamás en la Franja de Gaza, que debería conducir a "un final permanente de la guerra", dijo el expresidente estadounidense, Joe Biden.
El Mandatario israelí hoy se reunirá con Trump y el miércoles conversará con el secretario de Defensa, Pete Hegseth, junto al asesor de Seguridad Nacional, Mike Waltz. El jueves, dialogará con senadores y congresistas.