El arribo de Donald Trump por segunda vez a la Casa Blanca ha traído un huracán de cambios, decretos y promesas. Entre ellas, una de las más polémicas tiene relación con cómo enfrentará el diálogo con Latinoamérica.
Tras asumir el cargo el lunes en una ceremonia en el Capitolio, Trump reafirmó varias de sus promesas de campaña y participó en diversos actos públicos, entre ellos uno en el Capital One Arena, donde firmó una serie de decretos frente a la audiencia.
Posteriormente, el republicano se trasladó al palacio de gobierno, para atender a los medios desde el Despacho Oval, mientras continuaba firmando decretos, algunos de los cuales revocaron medidas de su predecesor, Joe Biden.
En ese contexto, Trump contestó una pregunta de una periodista brasileña sobre cómo veía la relación de EE.UU. con América Latina y con Brasil.
"Nos necesitan mucho más de lo que nosotros los necesitamos. No los necesitamos; nos necesitan. Todos nos necesitan", dijo el mandatario.
No obstante, Trump puntualizó que espera que las relaciones bilaterales con Latinoam{erica y Brasil sean "excelentes" durante su mandato.
Horas antes, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, deseó a Trump un mandato "exitoso" que promueva "la prosperidad y el bienestar del pueblo de EE.UU.", y "un mundo más justo y pacífico".
En cuanto a la decisión del nuevo mandatario, de retirar al país norteamericano del Acuerdo de París, el diplomático brasileño André Corrêa do Lago, designado ayer presidente de la COP30, por el Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, dijo que tendrá un impacto "significativo" sobre la cumbre climática que se celebrará en noviembre, pero que "vamos a tener que lidiar con eso".
México y Panamá
Tras los anuncios sobre las medidas que adoptará en la frontera que comparten ambos países, la secretaria mexicana de Turismo, Josefina Rodríguez, dijo que su país "tiene una estrategia" y "no estamos preocupados, estamos ocupados".
Por su parte, la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, buscó ayer responder con la "cabeza fría" y llamados a la "calma" a la pila de decretos contra México del nuevo mandatario, sobre migración, seguridad, comercio y hasta renombrar el Golfo de México.
Sheinbaum prometió que "siempre va a defender a México por encima de todo" y sobre el cambio de nombre a Golfo de América, afirmó que "seguirá siendo Golfo de México para el mundo entero" pese a Trump.
A su turno, y tras la promesa en el discurso de investidura de Donald Trump, de "retomar" el Canal de Panamá, el presidente panameño, José Raúl Mulino, dijo que "el Canal no fue una concesión de nadie. Fue el resultado de luchas generacionales que culminaron en 1999. Nunca nos lo regalaron porque nunca fue de ellos".
Por su parte, el Gobierno cubano cargó ayer martes contra la decisión de EE.UU. de reintegrar a la isla en la lista de países patrocinadores del terrorismo y reconoció que la decisión tendrá un efecto "muy dañino" en su economía .
El polémico decreto firmado por Trump horas después de asumir su puesto, que establece que las personas nacidas en EE.UU. de padres indocumentados o con un estatus legal "temporal"-como una visa de trabajo o turista- no podrán obtener la ciudadanía estadounidense, provocó que un grupo de 18 estados con gobiernos demócratas interpusieran ayerrtes una demanda en contra del nuevo presidente .
El texto alega que el decreto presidencial es "ilegal" y atenta contra la Constitución, ya que en la Enmienda 14 se establece que toda persona nacida en suelo estadounidense obtiene automáticamente la nacionalidad, independientemente del estatus migratorio de sus padres.
El Gobierno de Trump, dio vía libre además ayer a las redadas de migración en lugares previamente considerados "protegidos" como escuelas, iglesias y hospitales, luego que el Departamento de Seguridad Naciona revocó una directriz de la administración de Biden que instruía a las autoridades migratorias a evitar redadas en estos lugares o cerca a ellos.
Finalmente, el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, dijo que espera que el presidente de EE.UU. "reconsidere" su decisión de retirar al país norteamericano de la Organización Mundial de la Salud (OMS), por el "beneficio de la salud y el bienestar de millones de personas en todo el mundo".