Todavía recuerdo, a fines de los años 80, cuando caminaba durante el verano por el centro de Osorno y un hedor irrespirable provenía del basural ubicado a la entrada de Ovejería. Han pasado más de 35 años y el pasado fin de semana, junto a mi familia, fuimos a conocer el nuevo Parque Urbano Alberto Hott, que se suma a los ya existentes Chuyaca, Francke, Bellavista y Cuarto Centenario. Sin duda, Osorno puede afirmar con orgullo que está consolidando una imagen de ciudad parque, transformando, por ejemplo, un antiguo basural y un cementerio en espacios públicos que la ciudadanía y los visitantes valoran y utilizan con frecuencia. Esto refleja la visión de las diversas autoridades comunales de las últimas décadas, que han trabajado en rescatar sitios eriazos y convertirlos en lugares de acogida y esparcimiento para la población.
En los últimos años, los habitantes de la ciudad han ocupado masivamente estos pulmones verdes, que han cobijado actividades como ferias costumbristas, festivales, conciertos, eventos deportivos y, simplemente, se han convertido en espacios de recreación y ocio para las familias osorninas.
Ahora bien, ¿por qué son tan importantes los parques urbanos para la calidad de vida de la población? Porque ofrecen diversos beneficios sociales y ambientales. Se destacan la creación de espacios de recreación, facilitan las interacciones sociales y actividades que fomentan el sentido de pertenencia, logrando un verdadero sentido de comunidad. Además, son accesibles para personas de diferentes edades, culturas y condiciones económicas, lo que genera una mayor inclusión social. Por otro lado, los ecosistemas urbanos actúan como filtros naturales, mejorando la calidad del aire, contribuyen a la conservación de la biodiversidad, regulan la temperatura y hacen que las ciudades sean más frescas, entre otros beneficios.
En este contexto, el gran desafío para nuestras autoridades locales es seguir creando y manteniendo estos espacios públicos, y como ciudadanos, debemos valorarlos y protegerlos para que las próximas generaciones puedan disfrutar de uno de los grandes atributos de nuestra ciudad.
En definitiva, los parques urbanos son esenciales para mejorar la calidad de vida en las ciudades, equilibrando las necesidades humanas, sociales y ambientales. Por lo tanto, debemos aprovechar y cuidar estos espacios que tan bien le hacen a Osorno