El diputado Joaquín Lavín León renunció ayer a la Unión Demócrata Independiente (UDI) en medio la investigación que enfrenta por presunta emisión de boletas ideológicamente falsas, que a su vez se enmarcan en el caso de su esposa, la exalcaldesa de Maipú Cathy Barriga, quien es acusada de ilícitos reiterados de fraude al Fisco durante su administración (2016-2021).
Tras enfrentar el martes el allanamiento a su oficina al interior del Congreso Nacional y su domicilio particular, y pese a que asegura no haber cometido "ningún delito", la UDI confirmó que el diputado abandonó su militancia.
"Como directiva y partido esperamos que la investigación se realice con la mayor objetividad y celeridad posible, a objeto de esclarecer con total veracidad y rapidez los hechos", informaron desde la tienda en un comunicado de prensa.
La decisión fue abordada por el diputado y jefe de bancada UDI, Gustavo Benavente, quien afirmó que, aunque Lavín León "está siendo investigado por la justicia, necesitábamos igual algunos antecedentes más".
"Queríamos conversar con Joaquín Lavín. Algo conversamos, pero él nos comunicó que adoptó la renuncia hoy en la mañana ante el Servel. Nos contó que estaba bastante golpeado y cansado", expuso el parlamentario gremialista tras conocerse la renuncia de su compañero de bancada.
Dentro de las imputaciones contra Lavín figura también el haber ejercido como una especie de "alcalde en las sombras" durante el mandato de su esposa, con injerencia y poder de decisión respecto de cargos y despidos en el municipio cuando era liderado por su esposa, quien actualmente cumple con la medida cautelar de arresto domiciliario total.
El legislador afirmó tras los allanamientos que "aquí no se ha cometido ningún delito y esperamos que se investigue todo de manera rápida".
Además reiteró que "siempre hemos estado disponibles a colaborar" en las indagaciones; "proceso que la verdad ha sido muy largo, ya llevamos más de tres años de investigación", indicó.
Pese a ello el mismo día de las diligencias el presidente de la UDI, Guillermo Ramírez, afirmó que "no están los tiempos para defensas corporativas" y añadió que "si es que aquí hay algún tipo de irregularidad, dependiendo de la gravedad del asunto, se van a tomar medidas", lo que no alcanzó a ocurrir.
Y en referencia a este mismo tema, desde Renovación Nacional ayer Luis Pardo, director ejecutivo del Instituto Libertad, aseguró en radio Cooperativa que "este caso nos revela un ámbito en el cual realmente la modernización y reforma del Estado es urgente: las municipalidades, donde tenemos verdaderos colchones de contrataciones que no están bien justificadas".
"Una cosa es que los alcaldes asuman con personas de su confianza en ciertos cargos directivos, y eso es totalmente comprensible y además necesario. Otra cosa es cuando existe el uso de las municipalidades como refugio para dar empleo a un montón de gente que no corresponde", añadió.
Además planteó que "si es efectivo que Joaquín Lavín -cosa que a mí no me consta no estoy suscribiendo- decidía a quién despedir, amerita que revisemos todo esto del empleo público en la municipalidad y también en otros organismos del Estado.