Descargas domiciliarias, el enemigo silencioso que contamina el Damas
CIUDAD. La situación se arrastra por décadas y se debe a que al menos 85 viviendas aún no se han regularizado, por lo que no pueden acceder a la red sanitaria ni a otros proyectos. El problema aporta una contaminación constante de aguas servidas al cauce.
Paola Rojas Mendoza paola.rojas@australosorno.cl
Una de las fuentes que ha aportado más contaminación al río Damas son las fosas sépticas, conocidos como pozos negros, que aún existen en viviendas que no están regularizadas en el sector de la calle Santa María, por lo que no se han podido conectar a la red de alcantarillado de la ciudad.
Esta es una realidad que ha existido por años, transformándose en un enemigo silencioso para este delicado ecosistema que ha presentado un severo daño ambiental por décadas, pero que hasta la fecha no ha podido ser solucionado del todo, ya que siempre se están denunciando nuevas descargas, aunque pocas veces se dice que provienen de viviendas.
En efecto, esta corresponde a una contaminación más escondida, pero que con los últimos análisis de muestras ha salido a la luz, ya que el elemento que más arrojan estas pruebas son principalmente coliformes fecales, lo que significa un claro indicio de descargas que provienen de hogares.
Sólo en el sector de calle Santa María existen 85 viviendas que no están conectadas a la red de alcantarillado, lo que representa un problema para los vecinos en términos sanitarios y legales, además del daño ambiental.
Con las manos atadas
Sobre este antiguo problema con que convive el sector de Santa María, el presidente de la Junta de Vecinos de la Población Angulo, Marcos Barrientos, señaló que la situación se ha expuesto por años a las autoridades, no sólo por la organización que representa, sino que también por las otras juntas que abarcan las orillas del Damas.
"Por nuestra parte, esto lo trabajamos con la municipalidad en el segundo periodo del alcalde Bertín y ahí se formó un comité de alcantarillado donde se consiguió que alrededor de 10 familias se conectaran a la matriz de Essal en ese tiempo. El problema fue que el resto de las casas no estaban regularizadas, y como están en pendiente, bajo las cotas que exige la norma, entonces no pueden optar a un proyecto de mejoramiento", explicó.
El dirigente agregó que este es un problema que viene desde hace muchísimos años atrás, pero que hasta la fecha no se ha pensado en una solución, por lo que la junta de vecinos se ve muchas veces con las manos atadas para conseguir avances, beneficios o proyectos, los cuales no pueden llegar a la totalidad de los vecinos, por no tener viviendas regularizadas.
"Por ejemplo, con el plan de descontaminación del aire nos ocurre lo mismo: nos exigen que para que las viviendas puedan optar a los subsidios de aislamiento térmico, tienen que estar regularizadas. Por eso hemos estado pidiendo que nos entreguen programas para regularizar las propiedades de la población, porque son muy antiguas y se quedan afuera de cualquier beneficio", manifestó.
Marcos Barrientos indicó que mientras no exista una voluntad por solucionar este problema, la contaminación al río permanecerá, ya que muchas de estas viviendas arrojan sus desechos directo al cauce, mientras que otras los depositan en fosas sépticas, donde luego van permeando el interior de la tierra hasta llegar a las napas subterráneas que van a dar al río finalmente.