Bolivia mancilla a La Roja y la deja cada vez más lejos del Mundial 2026
DERROTA. Un confundido Gareca sacó a Brereton a la media hora de partido y Chile cayó por 2-1 con un gol de Vargas ante un arquero recién lesionado.
Redacción
Sin ideas y con poca reacción, la Selección chilena perdió en el estadio Nacional por 2-1 con Bolivia, que cortó una racha de 31 años sin ganar fuera de casa por Clasificatorias.
Ricardo Gareca quiso dar un golpe de timón incorporando a cinco delanteros: Darío Osorio, Carlos Palacios, Víctor Dávila, Eduardo Vargas y Ben Brereton.
Y la apuesta del "Tigre" no dio resultados, transformándose en una oportunidad para la visita, que le sacó provecho a cada error del combinado nacional.
Primero con un fallo de Palacios en la salida que significó un contragolpe del rival y la tarjeta amarilla para Paulo Díaz, que se perderá el duelo con Brasil.
Al minuto 13 llegó la apertura del marcador para los altiplánicos, que bajo una fórmula similar a la anterior, buscaron en profundidad a Roberto Fernández por la izquierda. Matías Catalán no alcanzó a desviar el balón, el delantero avanzó por la banda y encontró a Carmelo Algarañaz para que definiera de primera.
Chile no encontraba respuestas y, en su intento por revertir la situación, Gareca se ganó las pifias de todo el estadio con la salida de Brereton por Vicente Pizarro pasada la media hora, a pesar de que el chileno-inglés fue el que más intentó en ofensiva.
Pero el fútbol le dio otra oportunidad a Chile, porque en la recta final del primer tiempo, Vargas le arrebató el balón a Carlos Lampe justo cuando el portero acusaba una lesión de gravedad.
"Turboman" se fue al arco sin oposición y empató el trámite, provocando la indignación de los rivales, pues el exjugador de Huachipato tuvo que ser retirado en camilla y reemplazado por Guillermo Viscarra. Más tarde el DT confirmó que el guardameta sufrió la rotura del tendón de aquiles.
Chile todavía celebraba el empate cuando, en los descuentos, Fernández volvió a desequilibrar por izquierda y esta vez le sirvió el balón a Miguel Terceros para adelantar a los forasteros.
Ni el entretiempo fue suficiente para un remezón en la Selección, a pesar de que Gareca intentó variar con los ingresos de Jean Meneses y Gonzalo Tapia por Víctor Dávila.
Pizarro fue el más incisivo en los intentos por encontrar la igualdad, incluso llegando a línea de fondo, sacando un centro donde reclamó un penal, y también pateando los tiros de esquina que no encontraron receptor.
Cuando todo parecía perdido, el árbitro sancionó una mano del zaguero Diego Medina en el área de Bolivia, pero cuando Vargas se predisponía a patear la pena máxima, desde el VAR llamaron al juez para revisar la jugada y anuló el tiro, pues había dado en la cara.
En la desesperación, La Roja buscó por aire y tanto Catalán como Díaz tuvieron sus oportunidades, pero todo quedó en 2-1 y Chile se estancó noveno con cinco puntos.
"NO ES una VERGüenza"
Lejos de asumirlo como un papelón, Gareca comentó que "está el dolor de perder, creo que no merecimos perder, que en el desarrollo del juego Chile hizo todo para ganar el partido, tuvo la iniciativa. Lejos está esto de una vergüenza, es un calificativo que no merecemos".
"La derrota es dura y lo que más me duele es que teníamos la expectativa de obtener un resultado. Son partidos importantes para sacarlos adelante. Esta derrota no me deja vacío porque estuvieron a la altura de las circunstancias, entregaron todo, dejaron el alma", agregó el DT.
Sobre el cambio de Brereton en el primer tiempo, explicó que en un inicio "buscamos mayor profundidad y vimos que a lo mejor no sincronizamos bien la contención. Cambiamos cuando yo lo creí conveniente. Forma parte de mi trabajo, calificar, plantear, entendí en ese momento que necesitábamos a alguien más en la mitad de la cancha".
Por su parte, el capitán de La Roja, Mauricio Isla, señaló que "cometimos muchos errores, cada uno tiene que analizar lo que hizo bien y lo que hizo mal. Me ha tocado vivir varios momentos, estamos allí, queda mucho, pero perdimos puntos muy dolorosos".
"Siempre es el mismo partido con Bolivia, ellos se meten atrás y te clavan por errores propios. Tenemos que olvidar lo que pasó antes, lo sentimos igual que el hincha, nosotros deberíamos estar peleando arriba, pero vamos a luchar hasta el final", sumó.