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de pesos para aquellas de menor valor.
En cuanto al precio de las propiedades, señaló que en Osorno han sufrido un gran incremento, ya que antes de la pandemia se podían encontrar, por ejemplo, parcelas en 35 o 40 millones de pesos, mientras que ahora todas están por sobre los 60 millones de pesos.
Asimismo, las casas y departamentos también han experimentado una fuerte alza, ya que todos los avalúos fiscales también subieron. "De repente sale una venta, pero es el mínimo, porque la gente hoy en día está arrendando y como muchos no tienen acceso al crédito, los arriendos son lo que más sale. Por eso también hay muchas inmobiliarias quebradas o con construcciones paralizadas, porque se genera tanta venta en verde y ahora todo está frenado", agregó.
En efecto, la corredora explicó que este semestre se han visto pocas casas en arriendo a un precio accesible y lo mismo ocurre con los departamentos. Ahora hay una buena demanda para alquilarlos, a diferencia de lo que pasaba unos meses atrás.
"Si bien hay más arriendos, las casas siguen siendo bastante caras. Además, hay que considerar el mes de garantía que se debe pagar, más el porcentaje para el corretaje. Por eso la gente busca arrendar directo para poder ahorrar, pero ahí se corre un riesgo, porque nadie asegura que pagarán o que los contratos estén bien hechos y que incluyan las cláusulas correspondientes", indicó.
Venta a empresas
El corredor de propiedades Michael Silva, de la empresa S y C, comentó que actualmente la gente invierte en bienes de menor valor, mientras que los de alta gama tienen muy poca demanda.
"El banco está dando créditos, el problema es que la gente no quiere pagar más de la cuenta y quienes están invirtiendo son las empresas. Por ejemplo, a nosotros una farmacéutica nos compró una casa de alta gama, pero son empresas que tienen solidez. Mientras que profesionales como ingenieros o médicos antes invertían en propiedades, hoy en día han puesto el freno de mano porque las tasas de interés están demasiado altas", expresó el corredor.
Silva agregó que, para los corredores en general, este es un problema, porque la mayor rigidez a la hora de otorgar créditos ha hecho que se venda mucho menos que en años anteriores.
"Las ventas nos han bajado bastante, yo estimo que en un 50%, y eso es harto. Las tasas más bajas las tienen Coopeuch y Banco Estado, y ahora podrían aumentar las ventas a empresas con Banco Estado, porque antes en Osorno no tenían crédito para empresas, ahora sí lo van a tener. Los otros bancos, para venta a empresas, ponen un montón de trabas; la casa hay que pasarla a uso comercial para que puedan otorgar el crédito", indicó Silva.
También entre los potenciales compradores que menciona Michael Silva están las Pymes, sin embargo, a estas pequeñas empresas les exigen como mínimo tres años de antigüedad.
"Para las personas naturales, el crédito está muy complicado por las tasas. Exigen mucho, y se puede complementar la renta con otros clientes, pero deben tener su estado financiero en forma impecable para poder ser aprobados por el banco", manifestó.
Un millón y medio de pesos líquidos es aproximadamente la renta exigida para una propiedad de 2 mil unidades de fomento, cifra que para muchas personas es inalcanzable.
20% de pie como mínimo, exige la banca para entregar el dinero restante que permita concretar la compra de la propiedad, además de otras exigencias como renta y bajo endeudamiento.
30% ha subido aproximadamente, el valor de las propiedades en los últimos cinco años y uno de los factores que explican esta alza es el incremento en el valor de los avalúos fiscales.