José Neipán, el cacique huilliche de La Costa que jamás habló el castellano
Asumió el cargo en 1929 y se hacía acompañar por un intérprete. Fue un líder que trabajó durante 35 años en favor de su pueblo. Incluso en agosto de 1959 viajó a Santiago, junto a Teófilo Maquehue, también dignatario costero, a una entrevista con el Presidente Jorge Alessandri, donde expuso los problemas que aquejaban al territorio.
Tras la celebración de cada aniversario de la República o efeméride histórica nacional o local, se esconde toda una galería de memorias poco conocidas, de sectores sociales en general olvidados que merecen ser recordados. Son pasajes de nuestra historia que están fuera del calendario formal de las efemérides nacionales, pero que cotidianamente alimentan el imaginario nacional.
Entre estas historias traslapadas está el relato central de la tradición del pueblo huilliche en la zona, en especial la evolución y desarrollo de los cacicazgos en el distrito de San Juan de la Costa.
Conocer el modo de cómo funcionaban los cacicazgos huilliches es indispensable para comprender la dinámica de los pueblos originarios, tanto del pasado como del presente. En especial entender las tensiones y compromisos entre los caciques por sus diferentes posturas frente a los problemas.
Un cacique muy reconocido en Osorno, de gran prestigio e influencia, fue José del Tránsito Neipán Collipay, que asumió el cacicazgo de San Juan de la Costa el año 1929, elegido por su pueblo en una asamblea tras el deceso de su predecesor, el cacique Félix Coliao Collipay.
Una de las particularidades de Neipán fue que no dominaba el idioma castellano y se hacía acompañar por un intérprete.
Entre las mayores preocupaciones que tuvieron que afrontar los jefes huilliches en décadas pasadas y hacerlas presentes a la autoridad para buscar la respectiva solución, estaba ya para 1958 la propuesta de que la lengua mapuche sea enseñada en las escuelas primarias de Chile y se asuma como un segundo idioma nacional. Hoy se imparte en numerosos planteles locales, tanto en la zona urbana como rural.
Era bastante común que las autoridades huilliches, frente a la presencia de enfermedades en el sector, solicitaran a las autoridades provinciales el envío de brigadas sanitarias con el fin de atacar y controlar casos de tifus exantemático, sarampión, ataques de pediculosis y de viruela muy comunes en el sector de la costa osornina.
Otra noticia, pero positiva para abril de 1958, fue que el Consejo de Caciques de La Costa acordó crear una biblioteca rural con el objeto de iniciar una labor de alfabetización entre los pobladores de ese sector, para lo cual solicitaron la cooperación de las autoridades de educación.
Preocupado de su pueblo
En la prensa local encontramos la petición del cacique Neipán sobre la creación de Juzgados de Indios en la provincia, con el objeto de resolver en debida forma las rencillas y litigios que en más de una oportunidad han llevado a situaciones molestas y complejas.
El reconocimiento de los antiguos títulos de Comisario del siglo XIX y los títulos de Merced sobre las tierras indígenas también fue una preocupación permanente del cacique Neipán, así como la mayor presencia de la Dirección de Asuntos Indígenas de 1953; y del Instituto de Desarrollo Indígena (IDI) en 1961.
En los años treinta, el cacique Neipán estuvo abocado a conciliar con las autoridades de gobierno las nuevas leyes sobre la propiedad austral y la realidad que se vivía en la jurisdicción a su cargo. Otra de las preocupaciones, latente en diciembre de 1955, fue la profunda alarma que generó la prolongada sequía, lo que significó el éxodo de animales y daños en la pequeña producción de trigo pastos y productos de chacarería, que disminuyeron su rendimiento para la subsistencia de los propietarios.
Fue en agosto de 1959 cuando el cacique Neipán, en compañía de Teófilo Maquehue, ambos dignatarios de la comunidad de San Juan de la Costa, viajaron a la capital con sus respectivas credenciales a una entrevista con el Presidente Jorge Alessandri, donde expusieron los problemas que aquejaban al territorio que representaban.
En sus 35 años de mandato, Neipán debió gestionar muchos y variados temas en favor de su pueblo.
Afuera de la intendencia
La imagen principal de esta semana fue tomada en el invierno del año 1946, en las afueras de la intendencia provincial (hoy Delegación Presidencial) luego de una entrevista con el intendente Arnoldo Keim.
Podemos observar al centro al cacique José del Tránsito Neipán Collipay con el bastón de mando de origen español en sus manos y ataviado con el collar de plata de su dignidad, junto a su comitiva compuesta de capitanejos, guilmenes, mocetones y de abrigo, con gafas oscuras, está el intérprete en una actitud de fuerte carácter. Un grupo de transeúntes observa con mucha curiosidad la inusual escena en las calles de Osorno.
Hoy son otros los referentes que preocupan a los caciques y otras las premuras que deben ser escuchadas, atendidas y solucionadas por las autoridades competentes.
Reconocimiento
El cacique José Neipán falleció en octubre de 1964 y se le recuerda con mucho respeto, ya que demostró en el desempeño de su mandato capacidad para conducir a su pueblo.
La comuna de San Juan de la Costa le rindió un tributo a su figura y liderazgo con una escultura tallada en madera que está situada en la ruta U-400 al mar, en el cruce del camino hacia Pucatrihue. Ahí fue personificado Neipán con su característico bastón de mando y con la mano izquierda alzada.
Fue sucedido en el cargo por Mateo Panguil Loncochino, que en noviembre del mismo año fue reconocido por la máxima autoridad de la provincia.
el cacique aparece al centro con el bastón de mando, junto a su comitiva. el intérprete está de abrigo y con gafas oscuras.
josé neipán fue un gran líder de su tiempo, muy respetado.