Ataque con dron en Tel Aviv por parte de rebeldes hutíes deja un muerto
EXPLOTÓ. Por "error humano" sistemas que interceptan aparato, no se activaron.
El ataque con un dron a Tel Aviv ayer, que dejó un muerto israelí y reivindicado por los rebeldes hutíes de Yemen, supone una nueva escalada de tensión en Medio Oriente y amenaza con extender la guerra en Gaza a otros frentes regionales, mientras Israel advierte de que está preparado "para cualquier escenario".
Un hombre israelí de unos 50 años murió en su departamento tras la explosión de un dron, que hirió a otras 8 personas. La víctima es Yevgeny Ferder, israelí de origen bielorruso que se mudó al país hace 2 años tras la invasión rusa de Ucrania.
De esta forma, un dron Sammad-3 de fabricación iraní lanzado desde Yemen, según confirmó el Ejército israelí, alcanzó durante la madrugada el espacio aéreo de Tel Aviv, cerca de la embajada de EEUU, explotando en el aire en pleno centro de la ciudad, sin que sonaran las alarmas antiaéreas debido a un "error humano".
"El Sammad-3 es un arma iraní que probablemente fue mejorada para ampliar su alcance de vuelo. Irán apoya, financia y arma a sus representantes en la región, en Gaza, Judea y Samaria (Cisjordania), Líbano, Siria y Yemen", afirmó el portavoz de Ejército, Daniel Hagari.
Los hutíes reivindicaron el lanzamiento además de un misil balístico y otros 3 drones contra Tel Aviv, interceptados por las baterías antiaéreas desplegadas por EEUU en la región antes de llegar al espacio israelí, pero un cuarto dron explotó en la urbe.
Si bien, sí fue detectado por el sistema de defensa Cúpula de Hierro, no se interceptó al no clasificarlo con un objeto hostil por un "error humano".
"Debemos estar preparados para todos los escenarios en todos los frentes. Debemos estar preparados con acciones defensivas y ofensivas", afirmó el ministro israelí de Defensa, Yoav Gallant, quien prometió "ajustar cuentas con quien cometa terrorismo contra Israel".
Gallant recordó que Israel ya está en guerra desde hace más de 9 meses en "sus fronteras norte y sur", en referencia al conflicto en Gaza, y al intenso intercambio de fuego con el grupo chií libanés Hezbollah.
Ataque
El ataque es la acción de más largo alcance de los hutíes contra Israel desde que comenzaron a atacar barcos vinculados al país en el mar Rojo, así como la ciudad sureña de Eilat, desde el 19 de noviembre, aunque ninguna ha resultado mortal ni causado daños graves.
En los últimos meses, los hutíes se han atribuido ataques contra el puerto de Haifa y el Mediterráneo, algunos en conjunto con milicias proiraníes de la Resistencia Islámica en Irak, que también se han unido a las acciones contra Israel "en solidaridad" con las milicias palestinas lideradas por Hamás que libran la guerra en Gaza, como hizo Hezbollah.
Por su parte, el grupo islamista Hamás felicitó a los hutíes por el éxito de su ataque contra "el corazón de Tel Aviv, centro de la entidad sionista y fuente de su orgullo, convirtiendo la ciudad en insegura". De hecho, su alcalde, Ron Huldai, elevó el estado de alarma.
"El ataque marca una nueva fase en las actividades de la resistencia", dijo Hamás, e hizo un llamado "a la unidad en esta batalla de honor y dignidad contra la entidad ocupante fascista".