Del 21 de mayo de 1879
"Y aquí estamos, ciudadanos ignorantes de lo que tanto costó obtener, mal agradecidos y llorones". Vivian Arend
Al 21 de mayo de 2024, mucha agua ha corrido bajo el puente. ¡Al abordaje muchachos! es, sin duda, la frase que enorgullece a los chilenos y cada 21 de mayo recordamos con profundo agradecimiento.
Sin embargo, el patriotismo hoy ya no es el mismo de antes. Por ejemplo, y sin ánimo de pelambre, la muerte de Gaspar Cabrales hoy sería motivo de una querella contra los almirantes, incluido don Arturo Prat y hasta condenados a un juicio eterno, con fiscal exclusivo de la causa, a fin averiguar qué pasó, por qué iba un menor de edad en la Esmeralda y en qué condiciones de trabajo. Los héroes se lo habrían pasado yendo a tribunales y sus familias estigmatizadas y acosadas por las ONG y otras agrupaciones "preocupadas" por aquellos temas.
Respecto al patriotismo del divino tesoro de nuestra juventud, efectivamente son capaces de marchar, pero para protestar. Ahora, en cuanto al patriotismo de los ciudadanos mayores de edad, obviamente, jamás veremos a un diputado saltar a cubierta enemiga, a un ex Presidente de la República defender un "pedacito de tierra más" o a algún exitoso empresario hacer guardia en algún lejano y frío lugar limítrofe. Jamás, total el país ya está hecho.
Por supuesto, tampoco se trata de comparar gestas heroicas del país recién nacido con actuales contiendas políticas de un país hecho y derecho. Sin embargo, en los últimos años Chile no ha "producido" héroes, sería como desconocer a todos los mártires de nuestras Fuerzas Armadas y Carabineros que han dado la vida para que sigamos siendo chilenos.
Y aquí estamos, ciudadanos ignorantes de lo que tanto costó obtener, mal agradecidos y llorones. Un país cuyos habitantes no disimulan su malestar hacia los militares y ciudadanos que admiramos a nuestras Fuerzas Armadas y de Orden.
El problema es el siguiente: los primeros disimulan su molestia hasta donde pueden (aunque ahora ni eso); y los segundos se lo pasan enviando correos electrónicos despotricando contra el "silencio de la derecha" y la manera en que les hemos dado la espalda. Aquí entre nos: ¿qué pensaría don Arturo al respecto?.
Ojalá algún día recobremos la cordura y seamos dignos de ese salto al abordaje. Saltar, no para protestar, sino para hacer de nuestro país una mejor nación... ¿o no?