Instructor ayuda a jóvenes vulnerables con clases gratuitas de Taekwondo
SOLIDARIO. Rudy Carabantes, de 31 años, aprendió este deporte de su padre y hoy lo replica con sus alumnos de 4 a 45 años.
Rudy Carabantes Lemuy, de 31 años, recorre la zona debido a su trabajo como conductor de insumos médicos. En sus incesantes viajes ha podido conocer las diversas realidades sociales de la provincia. Por eso decidió ayudar a jóvenes vulnerables con la actividad que más le apasiona y ocupa su tiempo libre: el Taekwondo, arte marcial que aprendió de su padre.
En 2015 formó su academia Jidokwan Osorno, la que retomó hace dos años producto de la pandemia, teniendo como punto de encuentro el gimnasio de la escuela Juan Ricardo Sánchez en Francke dos veces por semana; no obstante, debido al terminó del año escolar, están entrenando en una sede de la junta de vecinos 27 "El Bosque Parque Norte".
"Trabajo con niños de 4 años hasta adultos de 45, quienes se han reintegrado después de un receso por la pandemia. Tenemos un grupo de 60 alumnos, que entrenamos dos veces a la semana ahora en una sede social que gentilmente nos han facilitado para continuar con las prácticas", indicó.
Sin fines de lucro
Carabantes se siente feliz con su academia, ya que replica las técnicas que aprendió de su padre. Quienes están en sus registros o pasaron por la escuela, aprendieron el arte marcial de origen coreano de manera gratuita.
"No cobro, porque hay varios niños y jóvenes que no pueden costear una mensualidad de 30 mil a 50 mil pesos, que es el valor en una academia. Es un trabajo social. Como tuve la posibilidad de aprender gratis con mi padre, Juan Carabantes, replico lo mismo, él me enseñó este deporte y yo masifico lo aprendido. Es un acto sin fines de lucro. Y cuando tenemos que salir a competir nos preparamos meses antes, organizamos rifas y completadas con los apoderados. Hay ocasiones donde presentamos proyectos y pedimos aportes al municipio", señala el profesor de Taekwondo.
Una de las motivaciones más importantes de Rudy Carabantes es sacar a los jóvenes vulnerables de sus vicios, ya que "el deporte es algo que los motiva".
"La idea es reinsertarlos en la sociedad, porque hay muchos jóvenes metidos en el alcohol y la droga. Con unos pocos de ellos que demuestren interés y acaten las instrucciones del Taekwondo ya me doy por pagado. Encantarlos con este deporte, que se rehabiliten, dejen las malas juntas y los vicios", manifestó el instructor osornino.
Proyecciones
Uno de los desafíos de Rudy es lograr jóvenes talentos y posicionarlos a nivel nacional, incluso que lleguen a la selección nacional de este deporte.
"Siempre que entrenamos nos preparamos para las competencias. A ellos les gusta la metodología y se sienten motivados, asumen compromisos, acatan las instrucciones que se imparten. Mi objetivo es llevar a jóvenes de 15 años en adelante a la selección chilena o al menos a las puertas de la selección", expresó.
Rudy manifiesta que sus alumnos han sido constantes en los entrenamientos y ello les ha permitido participar en varios torneos, donde han cosechado triunfos.
"Se han preparado para diversos campeonatos, han estado en 10 este año y el último fue a comienzos de mes, donde lograron buenos resultados. Fue en la comuna de San Bernardo, donde lograron traer 18 medallas oro y 7 medallas de plata a Osorno, además del primer lugar en preinfantiles categorías 7 a 10 años, segundo lugar en adulto y tercero en infantiles, con el segundo lugar por equipo", detalló el deportista solidario, quien se siente orgulloso de estos resultados.
Además, comenta que su hija de 11 años, alumna de la academia, Antonella Carabantes, salió invicta en su categoría en las 10 competencias a las que asistió este año.
Apoyo
Nicolás Paillacheo, de 25 años, pasó por un cuadro de depresión tras la muerte de un familiar y logró salir adelante gracias a la ayuda que encontró en la academia.
"Hemos hechos varios grupos de amigos y se han rehabilitado varios chicos que hoy están en la escuela, lo que consideró un buen trabajo. Es una escuela donde Rudy entrega su pasión y amor, los alumnos no pagan nada, pero cuando hay competencias tenemos que comprometernos para buscar los recursos con beneficios. Sería bueno que empresas pudieran apadrinar estas iniciativas sin fines de lucro y donde el deporte permite salvar vidas. Soy un ejemplo de ello, ya que pude tratar mi depresión con el Taekwondo", manifestó.
Marcela Oporto es presidenta de la Junta de Vecinos en Francke, cuya sede social es usada como gimnasio los días de entrenamiento. La dirigenta también es apoderada de la escuela y ve con mucho orgullo la labor que está desarrollando el profesor Rudy Carabantes.
"Es un bien para los jóvenes, una escuela donde se enseña gratis y se hace con amor. Esta iniciativa debería ser replicada y apoyada por muchas empresas y entidades. Yo soy apoderada de la academia y hacemos beneficios para solventar los gastos en las competencias, que tienen costos altos. Hoy nadie hace las cosas por amor y aquí el profe Rudy logra motivar a las generaciones para que después sigan lo que les enseña", dijo.
Oporto indicó que su hija de 12 años, por ejemplo, ha presentado un cambio desde que entró a la escuela.
"Como madre es gratificante ver que mi hija participa en esa escuela, porque ha encontrado una segunda familia. Ha cambiado, se ha vuelto más responsable, ya no está metida en el teléfono celular o en la calle haciendo cosas malas. La escuela es una buena iniciativa para incentivar el deporte en los jóvenes. Ese ejemplo de solidaridad debería ser recompensado", sostuvo la dirigenta vecinal.