Familiares recordaron a las víctimas del golpe en el Memorial por la Paz
50 AÑOS. Masiva fue la concurrencia que tuvo la marcha y acto convocado por la Agrupación de Detenidos y Ejecutados Políticos. Culminó con una velatón en avenida Mackenna.
Más de un centenar de persona, entre familiares de la Agrupación de Detenidos y Ejecutados Políticos de Osorno, dirigentes de federaciones de trabajadores de la salud, autoridades comunales, provinciales y regionales, de organizaciones autoconvocadas participaron la jornada de ayer de los actos conmemorativos de los 50 años del 11 de septiembre.
Los asistentes a la convocatoria se reunieron en la plaza de Armas. Pasado mediodía salieron marchando por Ramírez hacia el Memorial por la Paz de avenida Mackenna, que conserva los nombres de 58 detenidos desaparecidos en la zona durante el gobierno de Augusto Pinochet.
La actividad, que era la única autorizada en la comuna, pasó por la plazuela Yungay y enfiló por Prat para seguir por la nueva Mackenna hasta Zenteno y retornar hasta la mitad de la avenida donde estaba instalado el escenario y más de 30 personas que esperaban la marcha.
Pasadas las 13 horas, con la interpretación del himno nacional y el izamiento de la bandera se dio inicio al acto central de los 50 años del 11 de septiembre de 1973, cuando se puso término al gobierno de la Unidad Popular encabezado por Salvador Allende.
Llamado
"El mensaje que hemos realizado siempre, durante estos 50 años, es que los asesinos de nuestros familiares, además de aquellos que los hicieron desaparecer -de los que van quedando pocos vivos-, sean valientes y nos digan dónde dejaron a nuestros familiares, porque para nosotros es una necesidad darles una sepultura digna, aunque digan que son puros huesos, pero nosotros necesitamos encontrar y enterrar sus osamentas", expreso Angélica Gallegos, presidenta de la Agrupación de Detenidos y Ejecutados Políticos de Osorno.
Sobre el Plan Nacional de Búsqueda y su misión de esclarecer las circunstancias de desaparición o muerte de las víctimas de desaparición forzada, de manera sistemática y permanente, de conformidad con las obligaciones del Estado de Chile y los estándares internacionales, Angélica Gallegos sostuvo que "nosotros tenemos una leve esperanza en que encontraremos la verdad y haremos justicia a lo ocurrido con nuestros familiares".
La dirigente señaló que en esta zona los responsables de las desapariciones y torturas de sus parientes fueron funcionarios policiales, muchos de ellos ya procesados y otros fallecidos, entre ellos el coronel (r) y jefe de la Tercera Comisaría de Rahue, Adrián Fernández, quien estaba a cargo de un grupo que se dedicó a la tortura y desaparición. Actualmente el ex funcionario policial permanece detenido en Punta Peuco y recibió una última condena de 15 años por el crimen del campesino de Chanco-Quilacahuín, Abelino Runca, ocurrido en diciembre de 1975.
Quien también se sumó al acto fue Nadia Ríos, quien el 3 de enero de 1975 no supo más de su hermano Ervit Ríos Soto, de 24 años, quien de Osorno se fue a estudiar Pedagogía en Santiago, pero de quien nunca más supieron su paradero.
"Como familia lo hemos buscado, recorrido muchos sectores (…) es difícil, lo seguimos buscando y en ello se han ido sumando los primos, sobrinos, tíos, amigos y no hay resultados desde el 3 de enero del '75 cuando era estudiante de la U. de Chile", detalló.
Conmemoración
La delegada presidencial provincial, Claudia Pailalef, estuvo presente en el acto en el Memorial por la Paz. Al finalizar la ceremonia señaló que "es una fecha cargada de emociones y reflexión de lo que tenemos que hacer como país, entendiendo que aún hay una herida abierta que cala profundamente a familiares directos de las personas que fueron asesinadas en dictadura".
Añadió que "las generaciones que fuimos capaces de compartir este conmovedor momento, como también las futuras generaciones, tienen que saber las cosas buenas y malas que hemos tenido como país. A partir de ahí podremos proyectar hacia el futuro siendo una sociedad que acepte las diferencias y seamos capaces de convivir".
La tarde de ayer se realizó una nueva marcha desde la plaza al Memorial donde se realizó una velatón. Según señaló Pailalef, al cierre de esta edición no se habían reportado incidentes en la zona.
58 nombres de personas que son de la zona y están en los registros de desaparecidos y ejecutados políticos figuran en el memorial.