Cirujanos del calzado: los zapateros que dan la pelea entre cueros y suelas
La llegada de productos asiáticos y plásticos llevó a muchos consumidores a optar por dicha oferta a bajo costo, en desmedro de los zapatos y botas de cuero, lo que trajo consigo un desmedro para quienes por décadas se han dedicado a teñirlo, repararlo o clavar las tapillas. Pese a ello, quedan talleres donde aún es posible escuchar sus herramientas.
En un recorrido por las calles comerciales del sector oriente o centro, se pueden ver vitrinas con calzados tanto de varones como para damas, pero muchos de ellos no son 100% cuero, como se ofertaban hasta hace unos años atrás.
Sectores
En su mayoría provienen de la industria asiática, donde lo sintético y desechable se ha ido posicionando en la venta nacional por su bajo costo; no obstante, el material no es tan resistente como antes, lo que genera que en el menor tiempo posible se pueda desechar y cambiar por otro nuevo o de alguna marca de moda.
Este fenómeno ha dejado al oficio de reparador de calzado ya en retirada y son muy pocos quienes mantienen viva esta tradición, en algunos casos familiar.
En las veredas de algunas calles en las poblaciones quedan algunos kioscos que sirvieron de taller para estos verdaderos cirujanos del calzado. Los que van quedando son, literalmente, contados con los dedos de la mano y luchan contra la llegada del calzado extranjero y de menor precio.
En un recorrido por la ciudad donde un equipo de este medio consultó a los transeúntes, muy pocos supieron responder sobre la ubicación de algún zapatero. Otros daban datos de lugares donde los inmuebles se reconvirtieron o bien sus dueños cerraron.
Y es que son pocos los que se mantienen vigentes en este rubro.