Vecinos de la ruta U-55 denuncian falta de señaléticas y tránsito de vehículos a exceso de velocidad
PUERTO OCTAY. Aseguran que turistas y camiones de alto tonelaje ahora circulan con mayor frecuencia por esta vía. La Comunidad Maricán está preocupada por los constantes accidentes en el conocido cruce Aichele.
Andreina Céspedes andreina.cespedes@australosorno.cl
Los habitantes de sectores aledaños a la ruta U-55, a la altura de la comuna de Puerto Octay, han manifestado su preocupación por la circulación de vehículos a exceso de velocidad, lo que atribuyen a la falta de señaléticas o controles policiales a los conductores que se desplazan por esta importante vía.
Esta situación afecta principalmente a quienes residen en el tramo que abarca desde el sector El Escudo hasta la Comunidad Maricán, camino a Las Cascadas (U-55V), que comprende del kilómetro 27 al 48 aproximadamente desde Osorno. En esta última localidad han buscado insistentemente visibilizar el problema por su cercanía con el conocido cruce Aichele, también llamado "curva de la muerte", debido a la cantidad de accidentes que han dejado víctimas fatales.
Los integrantes de esta comunidad indígena se reunieron recientemente con el alcalde de la comuna lacustre, Gerardo Gunckel; los concejales Peter Freitag y Víctor Hugo Santana, para entregar una carta en la que detallan los riesgos a los que se exponen diariamente y la necesidad urgente de adoptar medidas.
Más soluciones
Las denuncias de la Comunidad Maricán son de larga data, por lo que ya se habían brindado algunas soluciones en sus alrededores, tales como la instalación de una garita, parada de buses, luminarias y letreros que indican la velocidad máxima. Sin embargo, creen que falta mayor señalización en el trayecto tanto para quienes provienen de Osorno como desde Las Cascadas.
"Los vehículos no respetan la velocidad, así que hicimos el reclamo porque no hay ningún tipo de señalética que indique la existencia de una curva para bajar la velocidad o porque es un área poblada. A pesar de todos los accidentes que ha habido, de todas las muertes, todavía no se ha hecho nada al respecto", explicó Jacqueline Soto Maricán, tesorera de la comunidad huilliche.
Los residentes decidieron reflotar nuevamente esta inquietud a raíz de una colisión ocurrida el pasado 23 de julio en la ruta frente a sus viviendas, donde una persona quedó atrapada en uno de los vehículos. Al tratarse de una zona que deben transitar diariamente, en muchos casos con niños, consideraron que era necesario solicitar más seguridad.
"Me he podido dar cuenta, a través de los años, que tenemos un problema grave porque las personas no tienen conciencia".
Marianela Castillo comerciante