La escena de detectives de la PDI ingresando a las dependencias del Gobierno Regional (Gore) de Los Lagos ha constituido un episodio más, quizás el más llamativo, de la trama que se abrió hace unas semanas, cuando el Ministerio Público anunció que iniciaba una investigación por los convenios firmados el año pasado por la repartición estatal con tres fundaciones o corporaciones: Kimün, Participa y Chinquihue. Si era esto o no lo que el gobernador Patricio Vallespín quería evitar cuando fue a la Fiscalía a dejar voluntariamente 69 cajas de documentación, quedará ya para la anécdota. Lo relevante ahora es que el proceso investigativo está en marcha y mientras más pronto transcurra, mejor será para quienes les fueron incautados computadores y celulares, como para la propia opinión pública local, que espera certezas en cuanto a si hay responsabilidades penales o no en el traspaso de recursos públicos.

En la diligencia realizada el jueves pasado, la Fiscalía dispuso la incautación de equipos y documentación del gobernador, la administradora regional, tres directivos y un funcionario del Gore, frente a lo cual Vallespín ha vuelto a aseverar que la asignación directa de los proyectos, sin licitación de por medio, estuvo en plena regla y que no hay nada que ocultar.

Aunque las autoridades del Gobierno Regional han quedado en la primera línea de la mirada de la opinión pública (más aún con la espectacularidad de la policía arribando a oficinas públicas), hay otra instancia que debiese empezar a arrojar mayores luces acerca de lo que fue el proceso de aprobación de las transferencias, no tanto desde la dimensión penal, sino que desde la política. Asumiendo que no hay ninguna certeza todavía respecto de la eventuales responsabilidades penales, los integrantes del Consejo Regional deben salir del borde del debate y transparentar cuál fue la dinámica de la presentación de proyectos y su aprobación.

¿Votaron sin más lo que se les propuso? ¿Tuvieron tiempo para estudiar las iniciativas? ¿Alguno conocía a las instituciones patrocinantes, en particular las que venían de afuera? ¿No hubo siquiera un asomo de duda? Puede que no haya una dimensión penal, pero sí hay responsabilidades políticas que transparentar.

Cuando la atención está enfocada en lo negativo, es el mejor momento para avanzar en temas positivos, como los que anunciamos esta semana relacionados al nuevo abordaje que realizará este Gobierno Regional, de la mano de los Servicios de Salud de Osorno, Reloncaví y Chiloé.

Buscamos resolver problemas que afectan a la sociedad en su conjunto y que además son transversales, es decir, no discriminan el barrio en el que la persona vive y tampoco la cantidad de dinero que recibe cada mes.

Porque nadie está libre de caer en una extensa lista de espera, seguiremos trabajando en su resolución, sumando un nuevo esfuerzo que busca abordar temas relacionados con el cáncer, reconstrucciones mamarias, apoyo integral a personas en el espectro autista o la necesidad de trabajar para avanzar en la desintoxicación domiciliaria de personas con tratamientos ambulatorios en torno al alcohol y otras drogas, que tiene como derivada la prevención, por supuesto.

Particularmente en la provincia de Osorno, pretendemos responder con 2.274 intervenciones en 18 meses. Esto cuesta 540 millones de pesos y es una más de nuestras inversiones con nombre y apellido, ya que quienes padecen cáncer colorrectal, de pulmón, o asociados al consumo de tabaco, deben ser atendidos con prontitud y encontrar respuesta a su dolor, esa que nuevamente nace desde el Gobierno Regional, ejecutándose a través del Servicio de Salud.

Así enfrentaremos el problema con capacitación para la prevención y diagnóstico precoz del cáncer colorrectal, lo que en simple es incorporar a 3 mil nuevos usuarios de la población susceptible y 3 mil 500 bajo seguimiento preventivo; adicional a eso, se desplegará el programa de prevención de cáncer de pulmón y otros asociados al consumo de tabaco, que incorporará a 51 mil 996 nuevos beneficiarios y sus familias, es decir, 29.290 hombres y 22.706 mujeres.

Tenemos la experiencia desplegada en 2022 y aún en ejecución durante este año, vivencia que nos ha mostrado el rumbo en esta materia, ruta que tiene como destino tocar la puerta de los usuarios y resolver estos problemas de salud, trabajando además para evitar que se repliquen.