Paola Rojas Mendoza paola.rojas@australosorno.cl

Luego de un año de intenso trabajo del autor, recientemente se lanzó el libro titulado "Manual para sobrevivir a nuestra loca geografía", escrito por el geofísico Cristian Farías, tratándose de un manual que llama a la reflexión sobre por qué ante un fenómeno natural se producen catástrofes que pueden ser evitables mediante una buena planificación territorial.

Éste corresponde al segundo texto que entrega el experto, el cual tiene una gran relevancia para nuestra zona, ya que contiene un capítulo completo sobre los volcanes Osorno y Calbuco, los que en el pasado ya presentaron erupciones y causaron un grave daño en la población, producto precisamente de una mala planificación.

El autor plantea además los actuales riesgos que tiene la zona lacustre y volcánica, que presenta problemas como la falta de agua, una parcelación excesiva de terrenos y una mala conectividad vial para evacuar.

Manual para conversar

El geofísico y director del Departamento de Obras Civiles y Geología de la Universidad Católica de Temuco, Cristian Farías, explicó que este libro se trata de los desastres en Chile, donde la idea es recorrer el país de norte a sur revisando varios de los desastres que han ocurrido a través de la historia o que podrían pasar en el futuro, analizando por qué se han producido estas situaciones y dónde se encuentran los puntos complejos en que se debe trabajar.

"La idea central es siempre que los desastres no son naturales, sino más bien surgen debido a problemas que tienen que ver con la mala planificación, con la mala respuesta ante los fenómenos naturales y esa es la intención del libro, ir hablando sobre eso. El volcán Osorno hace erupción, pero nadie nos mandó a poner el pueblo de Las Cascadas justo por donde pasan los ríos de los volcanes, entonces, cualquier desastre que quede en el futuro con este pueblo, si es que llega a pasar, será completamente culpa nuestra como sociedad", sentenció.

Es por eso que la idea del libro, que apunta a decir que los desastres no son naturales, es para ir marcando la responsabilidad que tiene la sociedad como Estado, para ir pensando en cómo se irá preparando el país para distintos fenómenos que son inevitables.

"La idea del libro se dio el año pasado, cuando hablamos con la editora acerca de cómo sacar un segundo libro, porque ya al primero le había ido relativamente bien. Así conversando surgió la idea de los desastres, a ella le gustaban mucho estos temas, porque son de Estado y a mi me gustaba eso también y empezamos a darle una vuelta", comentó.

En un año se realizó este trabajo, el que implicó una profunda investigación de distintas zonas geográficas del país. En el resultado se puede encontrar un texto que invita a levantar el diálogo acerca de a qué nos estamos enfrentando