China envía al primer civil astronauta el espacio y anuncia misión tripulada a la Luna para antes de 2030
China anunció ayer que ya ha comenzado la "fase de alunizaje tripulado" de su programa de exploración lunar, objetivo que prevé hacer realidad antes de 2030, al tiempo que reveló las identidades de las tres personas que hoy pretende poner en órbita en su estación espacial.
El subdirector de la Agencia Espacial de Misiones Tripuladas de China, Lin Xiqiang, explicó que la Oficina de Ingeniería Espacial Tripulada de China "ha dado rienda suelta a los trabajos de desarrollo" de proyectos entre los que se incluyen "nuevos vehículos exploradores, trajes de alunizaje, una nueva generación de naves y nuevos cohetes".
Estancia en la luna
Los trabajos tienen como objetivo hacer realidad en el futuro "una estancia de corta duración en la Luna", una "exploración conjunta hombre-máquina" y la llevada a cabo de las tareas de "alunizaje, desplazamiento en la superficie, recogida de minerales, investigación científica y retorno a la Tierra", indicó Lin.
Lin realizó estas declaraciones tras anunciar el lanzamiento de la Shenzhou-16, que transportará hoy hasta la estación espacial Tiangong a tres astronautas, que se convertirán en los primeros en abordarla después de que completara su construcción en 2022.
China ya logró en 2019 alunizar la sonda Chang'e 4 en la cara oculta de la Luna, convirtiéndose en el primer país en conseguirlo.
Hace poco, Pekín anunció la cuarta fase de su programa de exploración lunar, que incluye la construcción en la próxima década de una base de exploración científica en el polo sur del satélite.
Cinco meses en el espacio
Los tres astronautas que parten hoy a la estación espacial Tiangong permanecerán durante aproximadamente cinco meses en ella. Se trata del veterano Jing Haipeng y los debutantes en el espacio Zhu Yangzhu y Gui Haichao.
Jing -de 57 años y componente del primer lote de astronautas que China entrenó- comandará la expedición, en la que será su cuarta misión, lo que lo convertirá en el astronauta chino más experimentado hasta la fecha.
Jing, que declaró tener "muchísimas ganas de volver al espacio", explicó que, para "mantener la mejor forma y estar listo para una misión espacial en cualquier momento" sigue un entrenamiento que incluye 600 flexiones diarias, 600 sentadillas y mil saltos a la comba, además de no descansar "casi nunca", incluidos fines de semana.
Por su parte, Yang, de 37 años y parte del tercer lote de astronautas chinos, se enroló en el Ejército chino en 2005 y ha trabajado como profesor universitario en una facultad de aeronáutica.
"En los últimos dos años, pasé de ser un ordinario profesor universitario a un 'guerrero volador', lo cual es un logro en mi carrera", afirmó Yang.
Gui, un profesor de también 37 años, indicó que siempre soñó con "trasladar su investigación científica al espacio" y que no dudó en presentarse en cuanto se presentó la oportunidad.
Así, Gui se convertirá en el primer astronauta chino que no forma parte del Ejército Popular de Liberación (Ejército chino).