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Agregó que las multas para quienes infrinjan la ordenanza deben ser ejemplares a modo de que quienes quieran hacerlo sin autorización, reciban duras sanciones.
Pero ¿y qué pasa con los ripieros que con bote y pala, de manera artesanal, extraen el producto de diferentes puntos como Ovejería o a la altura del antiguo puente San Pedro?
Al respecto el edil dijo que "los ripieros artesanales no deberían someterse a fiscalizaciones o un informe social para trabajar. Ellos son boteros que trabajan con sus propias manos, no están mecanizados y no veo que puedan generar un impacto. Se les aplicará la ordenanza, pero en un sentido muy mesurado. Además en el Concejo se habló de que en ciertos puntos esta ordenanza se puede reformular".
Impacto
El presidente de la Red Ambiental Ciudadana de Osorno, Ricardo Becerra, junto con destacar el hecho de que se haya aprobado y regularizado la extracción de áridos, agregó que el paso siguiente a la gestación de esta ordenanza es la generación de un catastro con los puntos habilitados para extraer el material.
Se refrendó, finalmente, que esta normativa surge de la necesidad de conservar el sistema global del medio ambiente, de manera de mantenerlo libre de contaminación, responsabilidad que no sólo le compete a las autoridades sino a todos los ciudadanos.
Becerra comentó que este tema tiene una larga data, porque hacía falta una regularización de la extracción de áridos pero a nivel nacional y extrapolarlo a las diferentes comunas con medidas definidas.
"Nosotros veíamos cómo las orillas de los ríos Rahue y Damas se estaban degradando a raíz de esta situación, por lo que pusimos este tema en el tapete hace más de una década. Comenzamos a insistir con el municipio para que ellos pudiesen establecer normativas que nos llevasen a una ordenanza. El año 2017 tuvimos reuniones con la administración anterior para analizar el tema y delinear algunas medidas, como por ejemplo sectorizar los lugares de extracción a través de una cartografía o mayor fiscalización, pero quedamos en eso", reconoció Becerra.
Comentó que el impacto que produce la extracción indiscriminada de ripio es grave porque afecta el ecosistema de los cauces, altera el flujo y las corrientes de las aguas debido a que se presentan socavones que han generado incluso la pérdida de vidas de personas que sobre todo en verano se bañan, en este caso en el río Rahue.
"No se dimensiona el daño que esta extracción indiscriminada genera. Nosotros no estamos en contra, pero tiene que ser bien regulado. Eso es lo que queremos", precisó Becerra.
Quien autoriza la extracción de áridos de los ríos es el Dirección de Obras Hidráulicas (DOH), que deberá analizar los antecedentes de los demandantes antes de decidir.
De hecho El Austral se intentó comunicar con la encargada de dicha unidad, Paloma Jara, para conocer antecedentes sobre esta ordenanza pero no se obtuvo respuesta.
Independiente de ello, el alcalde Carrillo dijo que si bien es la DOH quien da el visto bueno, los controles más técnicos y la firma final, como municipio van a supervisar que no se produzca una extracción de áridos de forma indiscriminada, sin las medidas de mitigación y todo lo que ello conlleva.
"Hay un cobro económico que son 5 UTM para quienes infrinjan la ordenanza y lo otro importante es que esta medida nos permite como municipio que, a pesar de que haya autorización de la DOH, nosotros podemos decir que no por un bien común mayor. Nosotros podemos rechazar esa autorización a sugerencia de los equipos técnicos", apuntó la autoridad comunal.
"No se dimensiona el daño que esta extracción indiscriminada genera. Nosotros no estamos en contra de la extracción, pero esto tiene que ser bien regulado".
Ricardo Becerra, Pdte. Red Ambiental