Programa Cardiovascular
Se recomienda retomar la vida saludable corrigiendo algunos hábitos, como una mala alimentación. El riesgo cardiovascular más frecuente ha sido entre la población adulta joven y se debe al tabaquismo y la obesidad.
Al Programa Cardiovascular del Ministerio de Salud ingresan pacientes de 15 años o más con antecedentes de enfermedad cardiovascular ateroesclerótica (enfermedades coronarias o cerebrovascular u otras), hipertensión arterial, diabetes mellitus, dislipidemia y usuarios mayores de 55 años que fuman tabaco.
Son varios los motivos que, de acuerdo a lo explicado por especialistas médicos, podrían precisar las razones respecto de un evidente aumento de usuarios. Uno de ellos tiene relación con el envejecimiento de la población, ya que las expectativas de vida en Chile aumentaron, al igual que en otros países del mundo, y eso ha llevado a que se desarrollen más patologías cardiovasculares que están asociadas a la edad.
A esta situación se debe sumar la extensa pandemia por covid-19 que debido a las restricciones de movilidad y mayor colapso del sistema público trajo un retraso en el diagnóstico de muchas patologías. Se estima que de alguna forma la salud cardiovascular quedó en deuda, porque se privilegió la atención de los casos de coronavirus y eso generó un retraso en la posibilidad de exámenes y consultas para determinar un diagnóstico.
Según especialistas, esa misma falta de acceso a una revisión oportuna está generando que, debido a que se está restableciendo la atención de salud en general, en el último año se haya registrado una verdadera avalancha de pacientes que se habían dejado de atender y que quieren volver a retomar sus tratamientos.
Según los datos, desde 2016 el riesgo cardiovascular más frecuente entre la población adulta joven (entre 20 a 49 años) ha sido el tabaquismo y enfermedades relacionadas a la obesidad, además de la falta de actividad física durante los años de confinamiento. Desde los recintos de salud se afirma que hay pacientes jóvenes con infartos o complicaciones que antes no eran comunes.
Por ello, se recomienda retomar la vida saludable corrigiendo algunos hábitos, como una mala alimentación, una vida sedentaria con poco ejercicio cardiovascular, ya que obviamente aumenta el riesgo de enfermedad coronaria, pero también consultar con tiempo y así evitar llegar a emergencias que pueden ser fatales.