Hampón intentó dispararle a un policía y terminó reducido con un balazo en la pierna
OPERATIVO. El delincuente, que salió de la cárcel en agosto, escapó de un control de tránsito. Se intentó escabullir en una zanja, pero fue detenido y regresó a prisión.
Un peligroso delincuente, que salió de la cárcel en agosto pasado, volverá a los módulos del penal de calle Amthauer tras ser formalizado la tarde de ayer por el delito de homicidio frustrado a un carabinero de servicio y porte ilegal de arma de fuego.
Se trata de Daniel Maldonado, de 24 años, con un abultado prontuario policial, quien la tarde del martes intentó dispararle a un policía, pero terminó herido reducido con un balazo en la pierna.
Según los informes recabados por este medio, efectivos policiales que realizaban una ronda por Ovejería en una patrulla casi fueron colisionados por un motorista que no respetó una señalización de tránsito. Lo persiguieron y lograron interceptar cerca de la escuela Suiza, en calle Felizardo Asenjo. Al momento de ser fiscalizado, el sujeto no pudo acreditar su identidad y, de forma desafiante, escapó del control policial hacia la cuesta Santa Flora, que une el sector bajo con el alto de Ovejería.
¡No volveré a la cárcel!
Al más puro estilo de Rambo, el mítico personaje de acción del cine ochentero, el hampón corrió hasta la mitad de la cuesta e ingresó a un sitio que colinda con un espacio eriazo, donde se parapetó en una zanja. Al ver que era seguido por uno de los uniformados, desde el lugar donde estaba oculto sacó un arma, apuntó al carabinero a una distancia de seis metros y lo amenazó de muerte. En medio del frenesí y nerviosismo, juró que jamás volvería a estar en prisión.
De manera inmediata se sumaron otros funcionarios policiales que llegaron en apoyo, donde uno de ellos le pidió en reiteradas ocasiones que bajara el arma. Y como no lo hizo, fiel a su intención de jamás volver a las "caletas" del penal osornino, el carabinero le disparó en la pierna, tras lo cual fue detenido.
El previo a caer lesionado, y al verse acorralado por Carabineros, el sujeto reiteró a gritos que no volvería a la cárcel. Tan decidido estaba en su cometido, que puso el arma de fuego que portaba en su mentón, con la intención de dispararse, pero segundos más tarde se arrepintió y lanzó el arma a un sitio vecino.
Carabineros asistió al herido y fue trasladado en una ambulancia hasta el Hospital Base San José de Osorno, donde quedó internado por la lesión a bala.
"Carabineros del retén de Ovejería detuvo a un sujeto con un nutrido prontuario policial por robo con intimidación, porte ilegal de arma de fuego, entre otros delitos. Al momento de su fiscalización no portaba documentos de la moto ni personales. Cuando le informaron que sería notificado de una infracción, escapó y amenazó con un arma de fuego al personal. El hecho se repitió en una zanja, donde debió ser reducido con un disparo", señaló el mayor Carlos Reyes, jefe de la primera Comisaría.
Pasado el mediodía de ayer se realizó en el mismo hospital la audiencia de formalización, donde el fiscal José Vivallos confirmó que se inició una investigación por homicidio frustrado y porte ilegal de arma de fuego. "Se pidió la prisión preventiva por el peligro que reviste su libertad", sostuvo.
El juez de Garantía determinó acoger la solicitud del Ministerio Público y decretó la prisión preventiva.
El imputado estuvo hasta las 17 horas de ayer bajo custodia de Carabineros en el recinto asistencial, para luego quedar al resguardo de personal de Gendarmería, a la espera de ser llevado nuevamente a la cárcel, el lugar donde juró que jamás regresaría.
2 disparos percutió Carabineros en defensa, uno de los cuales hirió al delincuente en una pierna.
70 días de investigación decretó el juez de Garantía para las diligencias de este caso policial.