Alerta internacional por viruela del mono
Se trata de una advertencia para prevenir y debe ser asumida con responsabilidad y calma desde la ciudadanía nacional y local. En Chile hay 39 casos confirmados; la mayoría en la R.Metropolitana. De ellos, 16 ya fueron dados de alta.
La Organización Mundial de la Salud declaró como "emergencia sanitaria de preocupación internacional" a la Viruela del Mono, enfermedad similar a la viruela humana, descubierta en animales en África en 1950 y detectada por primera vez en personas en 1970. En décadas nunca generó propagación; pero que en los últimos meses se ha expandido peligrosamente en todo el mundo. De acuerdo a los antecedentes registrados hasta el 21 de julio por los Centers for Disease Control and Prevention (CDC) se estima que hay 16.836 casos en 74 países.
En Chile son 39 los contagios registrados. Según el Ministerio de Salud se trata solamente de hombres, con edades entre 20 y 46 años, residentes en la Región Metropolitana; dos en Antofagasta y uno en La Araucanía. El 30% de ellos realizó un viaje internacional durante los últimos 21 días y un 23% tuvo contacto con viajeros en los 21 días previos al inicio de síntomas. Además, todos reportan "contacto sexual reciente con una nueva o múltiples parejas".
En la zona todavía no hay información de posibles enfermos, pero sí acciones de vigilancia ante la enfermedad, como en todo el país, desplegadas a partir de la alerta a la red nacional de epidemiología decretada hace exactamente un mes. Esto implica pesquisa temprana de casos (y registro digital de antecedentes) y reforzamiento de las capacidades de laboratorio en toda la red. Estas medidas buscan detectar los casos y aplicar la prevención adecuada, para evitar la propagación, que se produce principalmente por contacto con personas infectadas. Saliva, roce de piel, intercambio de fluidos, uso de toallas y sábanas de los enfermos, son algunas de las posibles vías de propagación.
Sin dudas que la notificación de la OMS debe ser tomada en cuenta, pero también es preciso mantener la calma y actuar con responsabilidad, concurriendo a centros asistenciales ante la aparición de síntomas sospechosos: fiebre, dolor muscular, inflamación de ganglios, cansancio generalizado y aparición de erupciones cutáneas en diferentes partes del cuerpo. Como en todas las enfermedades, la información a tiempo permite mejorar tratamientos y proteger a otras personas. El aprendizaje frente al covid-19 ayudará también ahora, sin dudas.