Foro para la Descentralización
El Foro busca convertirse en una instancia de diálogo político y técnico entre los distintos sectores y niveles de gobierno. Desde la Asociación de Gobernadores y Gobernadoras Regionales fueron claros en sostener que la instancia genera expectativas para las regiones.
Se inició una instancia absolutamente inédita y que forma parte del proceso destinado a dar mayores atribuciones a las regiones y así avanzar a una menor dependencia del poder central. Se trata del Foro para la Descentralización, que está a cargo de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), proceso que se extenderá por 100 días y tiene por principal meta que los ministerios del comité político elaboren, junto a los gobernadores regionales, el primer paquete de competencias que traspasará el Ejecutivo a los gobiernos regionales.
De acuerdo a lo informado por las autoridades en el inicio del encuentro, realizado en Rancagua, el Foro busca convertirse en una instancia de diálogo político y técnico entre los distintos sectores y niveles de gobierno. El plan es concordar qué facultades podrán ser traspasadas hacia los gobiernos regionales, en los ámbitos de ordenamiento territorial, desarrollo social y cultural y desarrollo y fomento productivo.
El subsecretario Miguel Crispi sostuvo, además, que "esa tradición centralista, una tradición de nuestro Estado chileno y de todas las regiones, es la que nuevamente vamos a intentar torcer en este espacio, por esto quiero celebrar el ánimo con el que llegamos hoy día, donde entendemos que estamos en la misma vereda, en la vereda de la descentralización y de quienes necesitan que las decisiones se tomen cerca de sus hogares, para que sean pertinentes y puedan generar mayor bienestar".
Desde la Asociación de Gobernadores y Gobernadoras Regionales fueron claros en sostener que la instancia genera expectativas para las regiones y una oportunidad para hacer un desarrollo regional sustentable. Si bien el proceso está comenzando, la mejor señal es que se esté realizando de manera conjunta y a través del diálogo con las regiones.
Los Gobiernos Regionales pueden y deben incidir en lo que suceda en los territorios, no para asumir un exceso de atribuciones, sino para que las regiones avancen hacia donde realmente se requiere y no solo sean zonas donde se repliquen las políticas del nivel central.