Redacción

Atochamientos en bencineras de Concepción, Talcahuano y Osorno, entre otras ciudades, fueron una de las postales de la jornada de ayer viernes, luego que la Empresa Nacional de Petróleo (ENAP) suspendiera la totalidad de sus operaciones logísticas y de distribución en su refinería, tras el bloqueo a sus instalaciones y al Terminal de San Vicente por parte de trabajadores contratistas agrupados en Fenatrasub.

La empresa estatal se mantenía en negociaciones con los trabajadores, las cuales no llegaron a buen término y dieron paso a acciones más radicalizadas que, de acuerdo con lo señalado por la compañía, podrían derivar en desabastecimiento de combustibles en toda la zona centro sur en los próximos cinco días.

"Esta es una situación inédita para la empresa y hemos dado el aviso correspondiente a la autoridad, informando que en un plazo de 5 días a partir de hoy, la Empresa no cuenta con abastecimiento de gasolina, diésel y kerosene doméstico", señalaron.

GESTIONES

La información, además de generar preocupación en la ciudadanía, movilizó rápidamente a las autoridades. A primera hora, la ministra del Interior, Izkia Siches, aseguró que se tomarían medidas para asegurar el abastecimiento y solucionar el conflicto, en coordinación con la delegada presidencial.

"Se le ha instruido hacer todas las acciones que están en su poder para lograr mantener el suministro y mantener las vías despejadas de ENAP. Es una empresa estratégica y las familias en sus hogares pueden estar tranquilos porque estamos trabajando para la normalización de ello", aseveró la secretaria de Estado.

Posteriormente fue el propio mandatario, Gabriel Boric, quien desde Puerto Natales aseguró que "estamos trabajando primero en el camino que es el espíritu de nuestro Gobierno, que es justamente el diálogo. Esperamos no tener que llegar a esas instancias (ley de seguridad interior), pero por cierto en el Estado tenemos el deber de garantizar el abastecimiento de, en este caso, el combustible a todas las zonas del país", dijo asegurando que la crisis de Biobío y la suspensión anunciada por ENAP en ningún caso significará un déficit a nivel nacional.

"Lo que hay es una advertencia respecto de escasez en una zona determinada por la paralización de funcionarios en una planta específica, no estamos hablando de escasez a nivel nacional", añadió.

El Gobierno anunció anoche el fin de las negociaciones con los camioneros que se encuentran en paro, debido a que estos no han despejado las rutas que mantenían bloqueadas. La ministra del Interior, Izkia Siches, demandó que las vías sean despejadas. "Todo tiene un límite y ese límite ya llegó", advirtió la secretaria de Estado.

Según la ministra, "hemos tenido la mejor voluntad de diálogo" con los transportistas movilizados y recalcó que el Gobierno considera "realmente inadmisible" que el bloqueo de rutas se mantenga hasta ahora.

La secretaria de Estado argumentó que el corte de rutas se ha mantenido "sin justificación" y que ello ha limitado "la libre circulación de nuestro país, al punto de llegar a impedir hasta el paso de una ambulancia con un paciente grave".

La ministra Siches subrayó que "como Gobierno nos vemos en la obligación de velar por el libre tránsito en nuestro país, de velar por nuestra ciudadanía".

La jefa de Gabinete advirtió que "vamos a utilizar todas las medidas que el Estado de derecho nos compete para poder liberar las rutas en el más breve plazo".

Los transportistas iniciaron su movilización, entre otros motivos, en demanda por mayor seguridad en su trabajo. La movilización se tradujo en diversos cortes de ruta, lo que ha dificultado la circulación de vehículos.

El jueves se conoció el caso de una ambulancia que transportaba a un adulto mayor a un recinto asistencial y que no pudo transitar por la Ruta 5 Sur debido a un bloqueo de los camioneros a la altura de Duqueco, en Los Ángeles.

La ministra Siches destacó, por contraposición, el acuerdo que se negoció con los contratistas de las empresas forestales, quienes demandan más seguridad ante los ataque que se viven en el sur del país: "Hemos llegado a un acuerdo".

El jueves pasado, en el Biobío, la delegada presidencial Daniela Dresdner anunció que los forestales habían llegado a un acuerdo con el Gobierno, el que se materializaría una vez que los movilizados recibieran una carta de la ministra del Interior formalizando las propuestas, algo que ya ocurrió.

En lo que se presupuestaba sería una jornada clave, el pleno de la Convención Constitucional -hasta el cierre de esta edición- continuaba votando el informe de la Comisión de Sistema Político, uno de los puntos medulares de la nueva carta magna y que contiene varias de las modificaciones que mayor debate han producido durante el funcionamiento del órgano.

De hecho, el propio presidente Boric indicó desde su gira austral que el de ayer sería un día clave. "No tengo ninguna duda de que van a llegar a acuerdo: el sistema político en Chile tiene que cambiar, porque no nos olvidemos que venimos saliendo de una crisis: el estallido social existió, no fue un invento, y fue producto porque las instituciones no estaban respondiendo", aseguró.

Sesenta artículos y 24 indicaciones eran los que se revisarían por parte de los convencionales, en materias como las atribuciones del Congreso de Diputadas y Diputados, que se aprobó por mayoría como "un órgano deliberativo, paritario y plurinacional que representa al pueblo".

Además, el pleno avanzó en la aprobación de varias atribuciones que tendrá la Cámara de las Regiones -que reemplazaría al Senado en la nueva constitución-, entre ellas su resolución en acusaciones constitucionales, la definición de leyes en temas como vivienda, educación o salud, y reformas constitucionales.

Oposición

En tanto, desde la oposición, el diputado Guillermo Ramírez, subjefe de la bancada UDI, manifestó el compromiso del sector de propiciar un proceso que derive en una nueva constitución si es que en el plebiscito de salida de septiembre próximo triunfa la opción del Rechazo del borrador de la nueva carta magna.

"El proceso constituyente tiene que concluir con una propuesta de nueva Constitución. En castellano, lo que estoy diciendo es que, si gana el Rechazo, nosotros vamos a tener un compromiso para seguir adelante con algún proceso que permita que haya una nueva propuesta de texto constitucional", dijo en conversación con CNN Chile.

El parlamentario añadió que "nos parece evidente que en el plebiscito de entrada el mandato fue claro y contundente: Chile quiere una nueva Constitución, y como nosotros somos demócratas, vamos a respetar ese mandato", aunque no especificó la modalidad de redacción que apoyarían, si es que finalmente el texto borrador que prepara la actual Convención Constitucional no prospera.