Paola Rojas Mendoza

Este viernes comenzó el periodo de gestión de episodios críticos en la comuna, el cual existe desde el 2016 -con la entrada en vigencia del Plan de Descontaminación Ambiental (PDA) de Osorno- y que se extiende hasta el 30 de septiembre de cada año.

En esta oportunidad se distinguen dos factores que complican las condiciones para bajar la mala calidad del aire en la ciudad: la escasa oferta de leña seca y un nivel de precipitaciones que seguirá por debajo de lo normal, aunque en menor medida que en temporadas anteriores.

Cabe destacar que este año la gestión de episodios críticos incorpora a los días de emergencia y preemergencia un nuevo nivel que corresponde al de alerta, además se incluyen más restricciones en relación a la emanación de humos visibles.

Poca lluvia-alta presión

El doctor en Agroclimatología y académico de la Universidad de Chile, Fernando Santibáñez, explicó que a medida que nos acerquemos al invierno el Fenómeno de la Niña -que enfría las aguas del océano y deriva en bajas precipitaciones- se va a ir retirando, por lo que de junio en adelante las lluvias ocurrirán con cierta frecuencia.

"De todas maneras, dada la tendencia de este último tiempo, no estamos esperando un año lluvioso, ni siquiera un año que esté por encima de lo normal, sino que estamos hablando de entre lo normal y un poquito hacia abajo del promedio histórico", reconoció.

No obstante el experto añadió que se está recuperando la frecuencia con que los frentes están llegando al continente, pero por ahora lo hacen desde Chiloé al sur. Se espera que suba más al norte en los próximos meses, por lo que aumentaría un poco más la frecuencia de lluvias en la región, pero no lo suficiente para calificar la temporada como lluviosa.

"En ningún caso podríamos calificarlo como un año lluvioso, porque no hay ningún pronóstico que lo diga así, pero sí un año en que la condición no sería tan crítica como en los anteriores. Desde el río Toltén al sur y hacia el norte la situación va a ser más complicada", explicó.

En cuanto a la relación clima y contaminación, el doctor Santibáñez indicó que se podrían presentar episodios de alta presión, que son los que producen una alta contaminación del aire.

"Podría haber una cierta frecuencia de episodios de contaminación, quizás mayor a lo normal, porque el anticiclón se ha venido acercando mucho en los últimos años al continente y lo que trae son altas presiones. Esto significa que el aire baja desde arriba hacia el suelo y eso hace que la contaminación se quede muy pegada en los primeros metros de la atmósfera, lo que hace subir los índices de contaminación. A raíz de ello, este año no será tan favorable desde el punto de vista de la contaminación, pero no tan desfavorable desde el punto de vista de las lluvias", clarificó el experto.

Sin leña seca

Por otra parte el presidente de la Asociación Gremial de Comercializadores de Leña de Osorno (Enelsur), Jorge Wendler, precisó que en esta temporada persiste el problema de falta de leña seca por diversos factores, como la falta de mano de obra para producirla, con lo que el volumen de este año que manejan llegó a aproximadamente a mil metros cúbicos.

El dirigente señaló que con el ingreso de los pellets, el consumo de leña ha bajado en algo, pero se trata de un sistema que sigue siendo más barato, por lo que es una necesidad contar con el apoyo para producirla, para contar con una oferta de producto seco para no seguir contribuyendo con material particulado fino que genera la combustión de madera húmeda.

Sobre este tema, el alcalde Emeterio Carrillo señaló que actualmente el municipio se

"Podría haber una cierta frecuencia de episodios de contaminación, quizás mayor a lo normal, porque el anticiclón se ha venido acercando y lo que trae son altas presiones"

Fernando Santibáñez, Académico U. de Chile