La Unión queda sin suministro tras rotura de ducto de aguas servidas en medio del río Bueno
RANCO. La emergencia ocurrió en tuberías que pasan por Cocule, donde el líquido putrefacto se vertió al cauce. El corte de 12 horas fue para reparar la falla y aminorar el impacto. Se instalaron 36 dispensadores en toda la ciudad.
Establecimientos comerciales cerrados a las 16 horas y filas de personas buscando agua mineral en los supermercados, fue la tónica ayer en la ciudad capital de la provincia del Ranco, ya que el suministro de agua potable fue suspendido durante 12 horas por la rotura de un ducto sobre el río Bueno, en el sector Cocule.
La empresa Essal informó al mediodía que los 40 mil habitantes de La Unión estarían sin el vital líquido hasta muy cerca de la medianoche.
El llamado publicitado en todos los medios alertó a los vecinos, que recordaron lo acontecido en Osorno en julio de 2019, cuando los habitantes de la ciudad debieron soportar varios días sin este servicio, debido a la contaminación con hidrocarburos en la planta captadora en Caipulli. Ese antecedente los motivó para salir a comprar todos los bidones y botellas con agua disponibles en el comercio local.
Emergencia en COCULE
La emergencia ocurrió en el sector Cocule, a 4 kilómetros de La Unión hacia el sur, donde una de las tuberías que traslada las aguas servidas bajo el puente ferroviario, se rompió y vertió su putrefacto contenido a las aguas del Bueno, lo que genera un drama medioambiental que afecta a los unioninos, pero en especial a los socios del Comité de Agua Potable Rural (APR) que funciona aguas abajo del río Bueno.
El problema se debió a una falla en la matriz de aguas servidas que va hacia la planta de tratamiento ubicada en la rivera norte del Bueno.
Posteriormente se activó el plan de emergencia municipal, donde participó el jefe comunal Andrés Reinoso y los representantes de la empresa Essal, que dispusieron la instalación de 36 puntos de suministro de agua potable en toda la ciudad, buscando minimizar las distancias para evitar problemas a la comunidad.
Comercio cerrado
El comercio fue alertado y se recomendó a todos los establecimientos que trabajan con comidas cerrar sus puertas. Lo mismo hicieron los supermercados, que a las 16 horas ya habían evacuado a sus clientes y cerraron para no generar una mayor cantidad de aguas servidas, para así minimizar el impacto en el cauce, que es el mayor proveedor de agua potable en la zona.
El gerente del Medio Ambiente de Essal, Marcelo Cofré, explicó que el corte generalizado del agua en La Unión fue para proteger al medio ambiente y el río Bueno, "entendiendo que es una medida difícil y dolorosa suspender el servicio de agua potable, pero al hacerlo evitamos la generación de aguas servidas y con ello que una mayor cantidad caiga al río; además, nos permite efectuar la reparación o el acoplamiento de los nuevos equipos con mayor rapidez".
Agregó que comenzaron a trabajar en la emergencia desde muy temprano. "Hicimos llegar nuestras maquinarias, porque el sector donde se produjo el problema es apartado y en altura; acudió personal especializado y al cierre del día la emergencia podría estar superada; vamos a poder trasladar las aguas servidas a la planta de tratamiento y se descarta cualquier contaminación en el agua potable de La Unión, porque no hay ni hubo riesgo de contaminación", aseveró.
La suspensión del servicio fue para evitar que cayera agua sin tratar al río. En total se habilitaron 36 puntos de suministro de agua potable en toda la ciudad, donde el trabajo estuvo coordinado con la municipalidad. Los equipos de emergencia recomendaron a los APR de la zona no captar aguas del río Bueno, para lo cual se les envió el líquido en vehículos del municipio unionino.
La primera autoridad de La Unión expresó su preocupación por lo sucedido y confirmó la decisión de suspender las clases en todos los planteles educacionales, para evitar que aumenten los efectos negativos de esta emergencia sanitaria y medioambiental en la capital del Ranco.