Escasez de insumos genera retrasos de hasta un mes en la entrega de uniformes escolares
VESTUARIO. La falta de telas a nivel nacional ha impedido que las fábricas de confecciones osorninas puedan cumplir con los pedidos de ropa a tiempo.
Hace algunos meses, las clases presenciales para todos los escolares era una realidad incierta para este año, por lo que obviamente casi ninguna familia previó que el regreso sería en un 100% este mes y con uniforme incluido, por lo que la compra de esta prenda recién se empezó a hacer en enero, con grandes dificultades de los talleres de la ciudad para encontrar insumos, lo que mantiene pedidos pendientes hasta fines de marzo por lo menos.
Tal como ocurre en diversas áreas de la producción, la confección de uniformes escolares se ha visto complicada debido a la falta de materiales, por lo que los plazos de entrega no han podido cumplirse a cabalidad, con retrasos nunca antes vistos.
Una de las fábricas de confecciones que trabaja en Osorno, entregando ropa para seis colegios de la ciudad, es Gioadis (ubicada en calle Guillermo Bühler) donde su dueña, Giovanna Jara, relató que encontrar materiales sigue estando muy complicado, sobre todo para mantener la calidad del producto final.
La empresaria señaló que a fines del año pasado la materia prima estaba disponible, pero el problema se presentó a contar de enero de 2022, ya que muchos de los insumos que se pidieron ese mes están recién llegando por estos días.
"Ahora llevo un mes atrasada en los últimos pedidos y la gente que pidió cuando volvió de sus vacaciones en la segunda quincena de febrero, está esperando la reposición. Todavía espero que lleguen mis algodones y no será hasta la próxima semana, con suerte", expresó.
Solo a pedido
En el caso de Confecciones Aichele (ubicado en la calle Julio Buschmann) la situación no es diferente, ya que han tenido grandes dificultades para conseguir telas para cumplir con una gran cantidad de apoderados de nueve colegios de Osorno.
"Las textiles cerraron algunos locales, entonces hemos seguido con muchos problemas para conseguir insumos, porque se demoran un mes en llegar, a veces 15 o 20 días. Siempre teníamos en stock todo el año, porque los apoderados tienen que reponer alguna prenda. Tratamos de hacerlo nuevamente este año, pero no se puede. Ya se vendió todo lo que teníamos y las telas llegaron tarde", indicó el propietario de la empresa, Erwin Aichele.
Agregó que había mucha incertidumbre entre los apoderados, por lo que llegaron tarde a comprar los uniformes y eso también pasó la cuenta a los fabricantes de uniformes, que no se atrevían a comprar los insumos por la incertidumbre de la vuelta presencial a las aulas.
Colapso de última hora
Colet Cortés, dueña de la fábrica de confecciones Creatif (en el strip center Las Quemas) manifestó que este año ha sido muy complejo en general con las telas, pero en su caso alcanzó a comprar, aunque los pedidos que se están haciendo ahora no se pueden cumplir hasta un plazo indefinido.
"Este año recibí muchos clientes nuevos, porque otras fábricas no pudieron completar sus pedidos. Hay muchas familias que todavía no tienen sus uniformes, aunque los compraron hace bastante rato. Hasta diciembre todavía las empresas textiles estaban respondiendo. Yo no pensé que iba a pasar esto en febrero", indicó.
El volumen de uniformes que maneja esta empresa no es tan grande, porque tiene una clientela fiel de años, pero absorbió a una parte de las familias que no encontraron otros lugares de confección.
"Febrero fue caótico y ahora sigo recibiendo gente en marzo. Me llegan a pedir polerones de buzo, pero ya no tengo. A veces les prueban tallas más chicas porque no hay más", expresó.
Colet Cortés manifestó que también se agrega una dificultad en la confección de las prendas, ya que también hay escasez de mano de obra para realizar este trabajo, lo que contribuye a los retrasos en los procesos y en las entregas a los clientes.
"Hemos seguido con muchos problemas para conseguir insumos, porque se demoran un mes en llegar".
Erwin Aichele, Dueño de Confecciones Aichele
100% de presencialidad se exigió este año a los colegios y gran parte de ellos
$200 pide uniforme escolar.