Consumidores detectan escasez de harina en el comercio local
PRODUCCIÓN. Vecinos aseguran que existe poco stock, sobre todo en supermercados, e incluso la venta de los quintales es limitada. Molineros señalan que existe una alta demanda del producto, pero aseguran que no hay problemas de abastecimiento.
El precio del pan, desde que comenzó la pandemia en nuestro país hace ya más de 2 años, ha subido de manera considerable e incluso se proyecta que puede llegar a los $2 mil 200 el kilo.
Ante este aumento del producto, muchos vecinos han optado por hacer el pan y otros productos en sus hogares, pero el gran problema que se presenta ahora es la escasez de harina en el comercio local.
En un recorrido por algunos supermercados de la ciudad se puede apreciar que en las góndolas existe poco stock e incluso en algunos locales simplemente no hay para la venta, lo que tiene a los vecinos y consumidores preocupados porque para muchos es un producto de primera necesidad.
Otra de las situaciones que se exhibe desde que comenzó la emergencia sanitaria son, primero, las filas en las afueras de los molinos que funcionan en la ciudad como el Rahue y el Schott para comprar quintales; y segundo, es que se puede adquirir el producto con un límite establecido por persona.
El presidente de la Asociación de Consumidores de Osorno (ACO), Luis Álvarez, comentó que hay una preocupación generalizada no sólo por el aumento sostenido del precio del pan, sino también porque hay una restricción en la venta de la harina. Hay problema de stock de trigo dado que el país no es un gran productor y no alcanzamos a abastecernos internamente, por lo que tenemos que traer de afuera, sostuvo.
"En el caso puntual de la harina, hay una preocupación sobre la falta de stock en algunos supermercados y llama la atención porque no estamos en etapa de desabastecimiento porque producción ha habido y eso da para especular. Además el costo también ha aumentado de manera considerable", detalló Álvarez.
La presidenta de la Unión Comunal de Juntas de Vecinos, Eliana Catrilef, añadió que también ve con preocupación el desabastecimiento porque son muchas las personas que consumen harina no sólo para poder hacer su propio pan, sino también porque tienen emprendimientos como venta de empanadas o preparaciones dulces, donde este producto es fundamental.
"No sólo en los supermercados no hay stock, sino que también en los mismos molinos están vendiendo, pero hasta cierto límite. Entonces esto preocupa, porque debido al