Erwin Schnaidt
Las lluvias han sido escasas este año y tan sólo han precipitado 884.5 milímetros en Puerto Montt, según publicó ayer en su página web la Dirección Meteorológica de Chile.
La cifra representa un déficit de un 42,9 % respecto de los 1.547,8 milímetros considerados como normal a la fecha.
Esta condición irremediablemente generará repercusiones en la actividad agrícola de la zona, como anticipó Rodrigo Mardones, gerente de la Asociación de Empresarios Agrícolas de la Provincia de Llanquihue (Agrollanquihue).
"Si terminamos un diciembre seco y llueve muy poco, vamos a tener un efecto en un buen mes para la producción de leche y para el crecimiento de los cultivos. Porque, en el fondo, nos estamos adelantando. Si tenemos un comportamiento tipo enero, se empieza a condicionar ese crecimiento y la producción", expuso.
Definió que ello podría generar pérdidas "de un 10% a un 40%, dependiendo de la gravedad. Eso no es un pronóstico, es lo que podría suceder si diciembre es muy seco", aclaró.
Dijo que no sólo las menores precipitaciones influyen en el buen desarrollo de la actividad, sino que también el aumento de la temperatura, especialmente en las mínimas. "Eso hace que haya una mayor evapotranspiración", añadió.
También genera que estén alertas, ya que se empieza a ver una menor producción de pasto, lo que repercute principalmente en el sector ganadero.
Panorama
Según el ejecutivo, ha existido una "mejor distribución del agua, con un invierno que llueve menos, lo que hizo ver una primavera no tan compleja".
Esta estación ha tenido lluvias intermitentes, reconoció Mardones, lo que ha sido suficiente para la agricultura. Pero, "si en diciembre no llueve o cae muy poca agua, eso empieza a comprometer los rendimientos de los cultivos", aunque todavía no están hablando de sequía, sino más bien de un "déficit hídrico acentuado".
Detalló que el hecho de llover en el último trimestre del año favorece el crecimiento de las plantas o siembras que vienen de invierno, así como cultivos suplementarios de lecherías que se hacen en octubre. "Entonces, si la primavera viene seca, no hay suficiente agua para el desarrollo inicial de la planta y soportará condiciones de estrés del verano", explicó.
Sistemas de riego
Una de las formas de contrarrestar esta constante merma de lluvias, es la implementación de sistemas de riego que solamente están cubriendo unas diez mil hectáreas de la región, que en gran parte mantienen especies frutales.
Quienes se verán más afectados de persistir este déficit en verano, serán quienes no poseen estos métodos de riego tecnificado, ya que dependen exclusivamente de la lluvia.
Comentó que se discute en la Cámara de Diputados una prórroga hasta el año 2033 de la ley de fomento al riego. "Esta tecnología no es la única solución; pero, te hace respirar más tranquilo", añadió.
Ayuda de indap
El secretario regional ministerial (seremi) de Agricultura, Eduardo Winkler, reconoció que el déficit de lluvias en la Provincia de Llanquihue "ha impactado en el crecimiento de las praderas y en la condición corporal de algunos animales de planteles bovinos y ovinos".
Durante el año, agregó, apoyaron a usuarios de Indap "para que accedieran a instrumentos que les ayudaran a sortear este escenario de menores lluvias y prepararse mejor para la siguiente temporada".
El seremi Winkler advirtió que como las proyecciones climáticas apuntan a un verano seco, "hace dos meses redestinamos nuestros esfuerzos para llegar a pequeños agricultores que no son atendidos por Indap, con alimento concentrado para sus animales y, de esta forma, ayudarles a sortear mejor el verano".
La autoridad del agro invitó a los agricultores a postular a los concursos de implementación de riego y de sistemas de acumulación de agua que ofrece Indap y la Comisión Nacional de Riego (CNR).
800 mil hectáreas de praderas y suelos agrícolas se estima que existen en la Región de Los Lagos.
90% puede llegar a bonificar la ley de fomento, a proyectos de infraestructura y sistemas de riego tecnificado.