Premian a la novela que "predijo" la pandemia
El libro "Mugre Rosa", de la escritora uruguaya Fernanda Trías, recibió esta semana en México el galardón Sor Juana Inés de la Cruz.
La escritora uruguaya Fernanda Trías recibió el miércoles pasado en México el Premio de Literatura Sor Juana Inés de la Cruz 2021 por su novela "Mugre rosa", una historia distópica en la que predijo la pandemia.
Trías, nacida en Montevideo en 1976, aseguró que siempre deseo recibir este galardón y recordó que cariñosamente la llamaron "bruja" por haber "predicho la pandemia" de la covid-19 en su libro, en donde esboza un "mundo distópico" en el que predominan la enfermedad y los hospitales colapsados.
"'Mugre rosa' (2020) en pocos meses pasó de existir únicamente en mi imaginación a ser alcanzado por la realidad: tapabocas, hospitales rebasados, encierros voluntarios y obligatorios, noticias falsas, control sanitario y estatal, miedo, confusión, negacionismo, cuerpos que se acumulaban en camiones, muertos que eran cifras", dijo la escritora.
La traductora y profesora de la Universidad de los Andes de Bogotá, donde reside, dijo que es casi imposible no escribir una ficción como la que la hizo merecedora del galardón en medio de un mundo en el que la humanidad está al borde de extinguirse. La insistencia de los humanos en "soñar a ser dioses" los ha llevado a alterar los ecosistemas y a convertirse en el mayor contaminante en la historia del planeta. La autora se planteó si en este momento de crisis la humanidad está al borde de un final o de un comienzo y se preguntó qué será lo que encontrará cuando "termine de roer a fuerza de consumo los recursos del mundo".
La novela de Trías fue elegida por el jurado por ser "capaz de mirar con valentía el vacío, pero también trata con ternura los temas centrales de la definición de lo humano como la enfermedad, la incertidumbre, la empatía y el dolor", dijo la portavoz del jurado, Ave Barrera.
Antes de "Mugre rosa" Trías escribió "La azotea" (2001) y "La ciudad invencible" (2014), además del compendio de cuentos "No soñarás flores" (2016), nominada al Premio Hispanoamericano de Cuento Gabriel García Márquez 2017.
Patrona
Sor Juana, a quien Trías llamó la patrona de las escritoras, fue pionera hace tres siglos de una lucha que las mujeres siguen librando y que al menos en la literatura las ha llevado a colocarse en un lugar que nunca antes tuvieron. "Nunca en la historia de la literatura ni en la historia de la humanidad las mujeres que escribimos habíamos tenido tanta visibilidad, nunca se habían publicado, leído, reseñado y premiado las obras de tantas escritoras", dijo Trías.
Reclamó que en la academia se siga hablando de la literatura femenina latinoamericana actual como algo extraordinario y cuestionando si se trata de talentos "excepcionales", aunque la historia misma del premio hable de que los libros hechos por mujeres tienen una larga tradición.
"A las escritoras latinoamericanas se nos pide a diario que hablemos sobre nosotras mismas sobre el hecho inaudito aparentemente inimaginable de que un cuerpo de mujer escriba y de qué, ¡oh, sopresa! lo haga bien", expresó.
La directora de la FIL, Marisol Schulz, recordó a la española Almudena Grandes, fallecida hace algunos días y que recibió el Premio Sor Juana en 2011.
El Premio Sor Juana Inés de la Cruz se constituyó en 1993 y es un reconocimiento al trabajo literario de las mujeres en el mundo hispano, premiando a la autora de una novela publicada originalmente en español.
La FIL, considerada la mayor ferial del libro en español, se desarrolla del 27 de noviembre hasta este domingo, con la asistencia de 600 escritores de 46 países, con la participación de 255 expositores de 27 países con una oferta editorial de 240.000 títulos.
Nacida en Montevideo en 1976, Trías dijo que siempre quiso recibir el premio Sor Juana Inés de la Cruz
Agencias
EFE
"Nunca en la historia las mujeres que escribimos habíamos tenido tanta visibilidad", dijo Trías al recibir el galardón.
Sossa Villada reivindica la escritura con mirada marginal
Los escritores trans han sido siempre despreciados y puestos "en tela de juicio" por el status quo, afirmó la escritora argentina Camila Sosa Villada, durante una charla con jóvenes el jueves en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara, México.
"La literatura siempre ha estado en manos de personas que han tenido la posibilidad de estudiar, pero siempre hemos sido los escritores marginales los que hemos estado en tela de juicio, hemos tenido que pagar un precio para que nos respeten o esperar que nos muriéramos para reeditar toda la obra", reclamó la narradora trasandina.
Sosa Villada (Córdoba, 1982) recordó a escritores como los chilenos Pedro Lemebel y Claudia Rodríguez, a quienes algunos sectores, aseguró, han vilipendiado por no haber salido de la academia y por dedicarse a la literatura por pasión, además de salirse de la heteronorma y el binarismo.
La actriz y escritora trans mantuvo una conversación acompañada de la mexicana Ana García Bergua en la que habló del proceso de construcción de su novela "Las malas" (2019) con la que saltó a la palestra pública y cuyas protagonistas se dedican al travestismo y la prostitución, de la que ella misma vivió durante un tiempo.
La narradora aseguró que, aunque comenzó a trabajar en la literatura apenas hace unos años y ha dedicado más de 15 años a la actuación, la idea de narrar y contar historias siempre estuvo presente en su mente.
"Ser travesti, actriz, prostituta también, todo eso lo hice sobre el cuerpo de una escritora. 'Las malas' y los libros que he escrito hasta ahorita son libros que comencé a escribir desde muy pequeño y recién ahora estoy encontrando palabras para eso", dijo la autora.
La argentina escribió también el libro de poesía "La novia de Sandro" (2015) y un ensayo autobiográfico titulado "El viaje inútil" (2018) y contó que el autor español Federico García Lorca fue su punto de partida para adentrarse en la escritura, una actividad que ella siempre consideró como "un acto muy íntimo y muy solitario".
Sosa Villada recordó que cuando era menor sus padres fomentaron su amor por la lectura y le regalaban libros en las fechas especiales o cuando sacaba buenas notas en el colegio, además de regalarle una máquina de escribir que usaba para crear sus primeras historias.
La literatura, además, le dio la posibilidad de superar y dejar atrás la etapa de su vida en que la prostitución y las adicciones eran una constante en su existencia.
"Para mí todo se trata de hacer lenguaje, de combinar palabras, de hacer imágenes con la palabra que es la única manera que entiendo de poder restituir un poco de dignidad a una vida que fue bastante indigna, aunque ahora soy muy digna", aseguró con cierta emoción la narradora argentina.
Camila Sosa Villada recibió de manos de la directora de la FIL, Marisol Schulz, el Premio Sor Juana Inés de la Cruz que no pudo recoger en 2020 debido a que la feria fue realizada el año pasado de manera virtual debido a la pandemia de coronavirus que ha golpeado al mundo.
Camila Sossa Villada nació en 1982 en Argentina.
EFE