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"La parte sanitaria de alcantarillados ya es un problema, porque la mayoría de los sectores están conectados a fosas sépticas individuales o pozos negros; y dependen de los sistemas de Agua Potable Rural (APR) para el agua potable, que están obsoletos y hacen lo que pueden. A eso sumemos que no hay terrenos, porque muchas familias no tienen ese tema regularizado y tampoco tenemos un plan regulador. Entonces, se tiran la pelota entre todos los servicios públicos para solucionar el tema y la gente sigue esperando por su casa o construye de forma irregular y el problema se sigue ampliando", manifestó el dirigente vecinal.
De hecho, en la comuna el avance en temas habitacionales está asociado al Programa de Habitabilidad Rural del Minvu, pero sigue siendo insuficiente para cubrir la demanda habitacional, más aún considerando que muchas familias se ven impedidas de postular por no tener saneados los títulos de sus terrenos.
Puyehue
En la comuna lacustre hay más de 800 familias pertenecientes a comités de vivienda que están afectadas por la imposibilidad de avanzar en sus proyectos habitacionales a causa de la nula capacidad de la planta de tratamiento de aguas servidas de la ciudad de Entre Lagos para sumar nuevos alcantarillados.
Teresa Llancar, presidenta del comité Las Golondrinas, explicó que son 130 familias que llevan más de 10 años esperando cumplir el sueño de la casa propia, el cual está frenado por la imposibilidad de conectar el proyecto habitacional que tienen aprobado a la planta de tratamiento de aguas servidas de Entre Lagos.
"Es urgente tener una nueva planta de tratamiento, porque la actual ya quedó chica y eso impide que muchas familias, incluidos nosotros, podamos avanzar en el tema de la casa propia. Además, esa planta es un foco de contaminación, entonces ¿cómo es posible que existan tantas trabas para lograr concretar ese proyecto?. Es una realidad que en esta comuna no se puede avanzar en construcciones sociales, porque no hay factibilidad sanitaria. Nosotros luchamos por el terreno, lo logramos y ahora el Minvu no puede construir porque no hay certificado de factibilidad y así es en toda la comuna. Aunque exista alguno que pueda avanzar, siempre se toparon con eso porque se requiere que las viviendas tengan alcantarillado y agua potable", explicó la dirigenta social.
Efectivamente, la planta de tratamiento de aguas servidas opera aproximadamente desde 1987 y si bien durante estas décadas se han realizado proyectos de mejoramiento, hace 10 años que opera a máxima capacidad y con tecnologías que están obsoletas en temas de cuidado ambiental. En el caso del agua potable, no hay problemas, porque el sistema aún tiene capacidad para sumar más arranques a los más de 1.700 que actualmente están en uso para cerca de 7 mil personas. Ambos servicios dependen de una organización funcional, mientras que el proyecto de construcción de una nueva planta es impulsado por el municipio de la comuna.
Puerto Octay
En el caso de Octay, el servicio de agua potable es completamente responsabilidad de la municipalidad, la que está encargada de su producción, mantención y administración, al igual que de los sistemas de alcantarillado y tratamiento de aguas servidas. Es esto mismo lo que ha demorado que exista una remodelación de la planta de tratamiento de aguas servidas que tiene una data superior a 10 años y una capacidad técnica que impide ampliar su rango operacional mediante nuevas construcciones con desagüe hacia la infraestructura municipal.
"Tenemos más de 600 familias en comités de vivienda esperando años para concretar la construcción de proyectos habitacionales sociales. Si se ha logrado hacer algo, ha sido a presión de la planta de tratamiento que no resiste más conexiones de alcantarillado y lo mismo pasa con el agua potable. Acá en la comuna la falencia está en las redes sanitarias, porque sin ellas no hay factibilidad. Entonces, ocurre que las personas construyen de forma irregular o buscan otras zonas para edificar, pero son las familias más vulnerables, porque existen sistemas de fosas y otros que son modernos y muy caros y, claro, quienes tienen casas acá para veranear los usan o eso creemos. Esto requiere de un trabajo conjunto de las autoridades comunales, regionales y nacionales, porque de lo contrario seguirá aumentando el problema", indicó Margarita Carrillo, presidenta de la Unión Comunal de Puerto Octay.
La zona urbana de la comuna estuvo más de un mes sin agua potable en 2019 por la contaminación de la planta de producción y parte de las redes de distribución, por lo que el consumo dependía de la entrega del vital elemento en camiones aljibe. A eso se suma que regularmente la comunidad urbana y rural evidencia problemas con las redes sanitarias. Existe un pago mínimo del servicio, lo que impide que el municipio pueda realizar un mejor trabajo.
Minvu
El seremi de Vivienda, Jorge Guevara, explicó que efectivamente la extensión de coberturas y ampliación de infraestructura física es un factor indispensable para concretar proyectos habitacionales sociales en estas tres comunas.
"Es un factor que frena el avance como nosotros quisiéramos, pero estamos ayudando a los respectivos municipios para solucionar las problemáticas que no son iguales en todas las comunas, aunque tienen como punto común sus redes sanitarias, ya sea de plantas de tratamiento, red de alcantarillado o agua potable. El catastro es de cerca de 1.500 familias en esta situación, pero trabajamos para solucionarlo", dijo el seremi.
Agregó que este problema se da en distintas zonas del país y se transforma en una problemática global.
"Acá en la comuna la falencia está en las redes sanitarias, porque sin ellas no hay factibilidad. Entonces, ocurre que las personas construyen de forma irregular o buscan otras zonas para edificar".
Margarita Carrillo presidenta de la Unión Comunal de Puerto Octay
2019 se registró en Octay un corte de agua de un mes por la contaminación de la planta de producción y distribución del vital elemento, que fue repartido en camiones aljibe para el consumo de las familias.
1.500 familias esperan por la casa propia asociadas a comités de viviendas de Puerto Octay, Puyehue y La Costa, donde las redes sanitarias de agua potable y alcantarillado impiden extender su capacidad técnica.
Un certificado de factibilidad para conectarse al sistema de agua potable o alcantarillado requieren los proyectos habitacionales (individuales o colectivos) asociados a subsidios entregados por el Minvu.