65 mil pesos y los ministros celebraban. Con la lógica del goteo en las ayudas, el país ha gastado más, las personas han tenido recurrir a sus propios ahorros y la crisis sanitaria se ha extendido en el tiempo. Si el objetivo es que las familias se queden en sus casas y se cuiden, la línea de la pobreza resulta insuficiente.

-Otro punto importante era el apoyo a las pymes. ¿Tampoco, a su juicio, basta lo que propone el Gobierno?

-Con las pymes nos encontramos en una situación aún peor. La propuesta del Gobierno es francamente pobre. Cuando una piensa que este Gobierno ya no te puede sorprender y ve esta propuesta, la verdad es que aún puede. Lamentablemente para mal. Propusimos un monto de tres mil millones en subsidios directos, el Gobierno se queda en poco más de mil, indiferenciados por tipos de pymes, salvo un pequeño adicional para las mujeres, con una serie de restricciones.

Nuestra propuesta establece un conjunto detallado de beneficios, suspensiones y condonaciones de pagos, e instrumentos bancarios entre muchos otros. Y un tema adicional es que hemos propuesto que el mercado de compras públicas debe comprarles a las pymes. No puede ser que el grueso de las compras públicas se vaya a los grandes. Sobre esto, no sólo no hay una coma en el anuncio del Gobierno y además están tramitando un proyecto que apunta a concentrar aún más. Insólito.

-Echa en falta también el apoyo a la salud primaria y medidas sanitarias. ¿Cuáles considera indispensables?

-Propusimos un conjunto de medidas entre las que destaca: apoyo a la salud primaria para tener los trazadores necesarios para cuidarnos de la pandemia, pagar los bonos comprometidos al personal de la salud y establecer el acceso gratuito a test PCR, hacernos cargo de las listas de espera de enfermedades que han sido desplazadas por la urgencia de la pandemia.

-¿Qué cree que se está jugando si estas medidas o proyectos no se implementan pronto?

-Como mayoría opositora hemos dicho que vamos a tramitar los proyectos que presente el Gobierno con sentido de urgencia. Queremos que el país pueda observar y participar de este debate, que conozca los argumentos de cada sector. Haremos nuestro mayor esfuerzo por mejorar las iniciativas insuficientes. El Gobierno tiene atribuciones exclusivas sobre aquellos aspectos que involucran recursos. Por ello, mejorar las ayudas está en sus manos. Vamos a legislar con seriedad, vamos a revisar los proyectos con rigurosidad, con especial atención en la letra chica a la que nos tiene acostumbrados el Gobierno.

-¿Cuál es su postura frente al llamado "impuesto a los súper ricos"?

-Este es un debate ético. Aunque algunos, con falsos argumentos técnicos, traten de bloquear el establecimiento de un aporte extraordinario de las más grandes fortunas del país, en este momento en que cientos de miles de familias sufren. La evidencia es clara: Las ocho fortunas de Chile, entre las cuales está el Presidente Piñera, han aumentado en 73% su patrimonio durante la pandemia. En el mismo Chile donde después de décadas hemos vuelto a sufrir la desnutrición porque hay familias que no tienen como alimentarse. Yo no me imagino a esas ocho familias multimillonarias o algunas de las 1.500 fortunas del país con más 22 millones de dólares, huyendo porque el Parlamento legisle un impuesto extraordinario. Por eso me comprometí a reponer en el Senado las indicaciones que nos permitan votar un "impuesto a los súper ricos".

-La situación de crisis económica y sanitaria, ¿podría interferir con la labor constituyente?

-Chile vive hoy cuatro crisis simultáneas. La crisis sanitaria se suma a la crisis política que venía de 2019 y genera además una crisis social y una económica graves. Como Presidenta del Senado me he comprometido personalmente en todo cuanto de mí dependa a apoyar y facilitar el trabajo de los y las constituyentes, con total respeto a su rol y sus atribuciones.

-Al respecto, ¿votó en la "papeleta verde" de pueblos originarios para constituyentes?

-Fue un momento de emoción y de alegría. Ese sábado en la mañana, con el voto de los pueblos originarios ya depositado en la urna -que era transparente- pude observar en esa imagen el primer voto verde entre otros votos blancos, cómo comenzábamos a cambiar la historia en nuestro país. En mi caso del Pueblo Diaguita. Creo que los escaños reservados han llegado para quedarse y que prontamente vamos a tener que avanzar en la integración de nuestros pueblos a todo nivel, en el Congreso, en los otros poderes del Estado, en los gobiernos regionales, con concejos municipales, en los gabinetes ministeriales. Pronto consagraremos un Estado plurinacional y multicultural.

-Pero no le gusta nada el carnet verde o "pase de movilidad". ¿Por qué?

-Pero ese es otro "verde". Nosotros somos defensores de las libertades civiles. Tenemos muchas dudas con este Estado de Emergencia tan extendido que aumenta las facultades de restricciones a las personas del Poder Ejecutivo. Pero la verdad nos parece contradictorio que mientras los expertos se debaten si estamos en un tercer brote de la pandemia o el segundo aún no se termina, y mientras estamos impulsando una agenda que les permita a las familias quedarse en casa para protegerse del virus, el Gobierno salga con un "pase" cuyo objetivo declarado es aumentar la movilidad. Para peor, lo presentan con un supuesto respaldo de los expertos que a poco andar se descubre que no era tal. Ojalá no sea una manera encubierta de colocar siempre a las personas al servicio de la economía, en lugar de destinar los recursos públicos necesarios para resguardar la salud y la vida de las personas.

-Pensando en los resultados de la votación de constituyentes y otros cargos, ¿lo toma como señal del Apocalipsis o como promesa de mejoría?

-Lo tomo como una señal poderosa de la ciudadanía de demanda por cambios profundos en la política. Los partidos tendrán que asumir la demanda de la ciudadanía, cambiar, modificarse, refundarse y algunos desaparecer. La democracia es un ser vivo, no una imagen detenida. Evoluciona y los partidos y movimientos también lo deben hacer. Creo que hay un mensaje central a cierta parte de la elite que vive en otro mundo, que desconfía de la gente, que cree que tiene la verdad y la gente está equivocada. Hay una demanda de cambios profundos para terminar con un sistema basado en el individualismo y avanzar hacia una sociedad de la colaboración y de la solidaridad.

-Gran parte de los partidos políticos salieron mal parados. ¿Le preocupa esa situación?

-Me preocupa más que algunos dirigentes políticos gasten más tiempo en argumentar que no les fue tan mal, cuando lo que hay que hacer es asumir el mensaje, rectificar y refundar mucho de la forma en que actúan los partidos y sus dirigencias.

-Y la irrupción de los independientes, ¿le parece un fenómeno saludable o inquietante?

-Toda elección que hacen los chilenos y chilenas me parece saludable. Lo que yo observo especialmente en la Convención Constitucional es la irrupción de un Chile diverso que quiere participar y que no ha tenido espacios. Nuestra democracia muestra además un evidente agotamiento. La pura lógica de la representación no alcanza. Debemos avanzar a maneras directas de participación del pueblo.

-Otro efecto de las votaciones fue desarmar un poco los esquemas de primarias, tanto en la derecha como en la oposición. ¿Son necesarias las primarias?

-Hay dos bloques políticos que inscribieron su primaria legal, la derecha con Chile Vamos y la izquierda con el Partido Comunista y el Frente Amplio. Nuestro sector, la centroizquierda de Unidad Constituyente, no lo hizo y será labor de los dirigentes partidarios resolver cómo seleccionar un representante. Yo creo que más importante que el modo de resolver un candidato o candidata, es que nos demos el tiempo para reflexionar sobre el mensaje que el pueblo nos dio en la reciente elección y acordemos al menos una base programática sobre el futuro Gobierno que le queremos ofrecer al país.

-También surgió su nombre como posible candidata de la DC y de la centroizquierda en general. Sin embargo, usted dijo que seguiría en su actual rol con miras a la oposición como alternativa. ¿Habrá condiciones para aquello?

-Como le digo, creo que como Presidenta del Senado lo responsable es concentrarme en mi rol, que es facilitar que hagamos frente al gobierno como mayoría opositora para lograr apoyos a las familias. Los temas de candidaturas deben resolverlos los dirigentes de los partidos.

-Señaló que no importan tanto las aventuras personales como construir un programa. Si se lograran acuerdos programáticos importantes, ¿reconsideraría ser candidata presidencial?

-Yo estaré disponible para lo que la Democracia Cristiana estime que sea necesario. Así lo conversé además con la presidenta de la DC Carmen Frei y lo señalé en la Junta Nacional. Hoy eso es trabajar por la unidad de la oposición desde la Mesa del Senado. Y, por cierto, estaré también disponible a colaborar en un programa serio y concreto para un nuevo Gobierno de la centroizquierda que recupere al país de la ausencia de gobernabilidad y paz social en la que nos está dejando la derecha y el Gobierno del Presidente Piñera.

-¿Qué espera de la segunda vuelta en la elección de gobernadores regionales?

-Espero que todos los chilenos y chilenas que quieren un país distinto salgan a votar masivamente. Esta es una elección histórica. Por primera vez la principal autoridad de cada región será un representante del pueblo, no del Gobierno central de turno.

-¿Cómo cree que serán los próximos meses en lo económico y en lo político?

-Se nos vienen tiempos muy complejos. Vamos a tener que reconstruir el país, reconstruir nuestra economía, levantar miles de pymes que han desaparecido y reconstruir también nuestras instituciones, seriamente dañadas en este período.

la opción de yasna provoste como abanderada presidencial irrumpió fuerte en la DC y ximena rincón decidió deponer su candidatura.

"Vamos a legislar (los mínimos comunes) con seriedad, vamos a revisar los proyectos con rigurosidad, con especial atención en la letra chica a la que nos tiene acostumbrados el Gobierno".

"Los partidos tendrán que asumir la demanda de la ciudadanía, cambiar, modificarse, refundarse y algunos desaparecer. La democracia es un ser vivo, no una imagen detenida".