Peluqueros de Osorno protestan en la plaza y exigen autorización para trabajar
MANIFESTACIÓN. Decenas de funcionarios ligados al rubro se reunieron el martes para develar los problemas graves económicos que los aquejan.
Peluqueras y diversas agrupaciones del rubro en Osorno se manifestaron en el centro de la ciudad el mediodía del pasado martes 27 de abril para exigir volver a sus labores y así generar ingresos nuevamente, los que han sido congelados por las cuarentenas, excepto las deudas que se van acumulando cada mes.
Al igual que otros gremios del pequeño comercio osornino, el golpe económico comenzó con la crisis del agua, cuando bruscamente debieron paralizar todas las actividades. Ello generó grandes pérdidas que nunca fueron compensadas. Por otro lado, tras el llamado "estallido social" y posteriormente la pandemia, las restricciones del Gobierno han terminado por poner al comercio en general en una posición desfavorable, sin tampoco tener algún tipo de compensación directa.
Se acumulan las deudas
Alicia Flores, vicepresidenta de la agrupación de Osorno, señaló que como peluqueras, masajistas, manicuristas, entre otros, tienen la implementación necesaria para atender en pandemia de acuerdo a los requerimientos tanto de aforo como medidas de seguridad.
"Hemos mandado cartas para que el presidente nos escuche o los ministros, no hemos recibido respuesta, no hemos tenido ayuda de nada, hemos tenido que seguir pagando las patentes sin poder trabajar. Son un sinfín de cosas. Muchas de nosotras llevamos el sustento a nuestros hogares y tampoco podemos seguir adelante con esta traba que nos tiene de verdad angustiados".
Amparito Mansilla, dirigente del Gremio de Peluqueros de Osorno, señaló que no pueden dejar de pagar las patentes comerciales, aunque no hayan tenido ningún tipo de ingreso, situación que se suma a la presión por el pago de arriendos para no perder sus locales.
"Tengo que seguir pagando el salón para no perderlo, no tenemos ningún apoyo, ni siquiera un subsidio de arriendo para la peluquería. Además, nos enteramos que no podemos dejar de pagar las patentes (...) y si debemos más de dos meses de arriendo, nos cerrarán los locales, entonces ustedes se imaginarán lo que significa eso. Es cruel la verdad", expresó.
Tenían la esperanza de que la cuarentena llegaría a su fin el lunes pasado, para seguir funcionando, ya que si todo sigue igual aumentarán sus deudas de agua, electricidad, arriendo y el pago de patentes que no habían considerado.
La diputada del distrito 25 Emilia Nuyado Ancapichún reiteró la urgencia de terminar con las cuarentenas debido a las graves consecuencias económicas para las pymes y donde las medidas del Gobierno para ellos han sido insuficientes, debido a que la mayor parte de los emprendedores no califica para recibir apoyo estatal de emergencia.
30 de marzo comenzó esta última cuarentena en la comuna de Osorno, que ya lleva seis semanas.