Tras la desafiliación de Provincial Osorno por parte de la ANFP el año 2012 a raíz de las millonarias deudas, la institución tuvo que rearmarse de nuevo y fue el ex jugador taurino Marcos Millape quien tomó la batuta junto a un grupo de hinchas para refundar el club.

Tras competir en 2013 en su asociación de origen (AFO), la entidad fue aceptada el 2014 por la ANFA para disputar la Tercera División B. El equipo estaba integrado por una base de jugadores de casa, pero no fue hasta el año siguiente cuando el club consiguió el ascenso a Tercera A.

En 2016 obtuvo el título de dicha categoría y el ascenso a la Segunda División A.

Debido a una campaña discreta en el inicio del certamen profesional 2017, que a la postre terminó en el descenso con Nelson Cossio en la banca, Millape fue cesado de sus funciones y no fue hasta el año pasado que volvió a ponerse el buzo taurino luego de entrenar a la Sub 19 de Iquique, a lo que sumó un breve paso como ayudante técnico en Rangers.

De palabra

Sin embargo a mediados de marzo la pandemia frenó el trabajo de pretemporada que había comenzado el "Torito".

Incluso los dirigentes del club determinaron congelar la participación del club en Tercera A, no obstante había un compromiso de palabra con Millape: retomaría las riendas del club en 2021.

Sin embargo eso nunca sucedió: el pasado viernes fue presentado como técnico para la temporada 2021 el argentino Ricardo Lunari. La noche anterior los dirigentes tuvieron una reunión vía Zoom con el ahora ex adiestrador taurino para comunicarle que prescindirían de sus servicios, pese al compromiso existente.

Después de varios días de silencio y mientras los hinchas e incluso ex técnicos y jugadores del equipo criticaron por redes sociales el actuar de la dirigencia que encabeza Eduardo González junto con el Grupo Hijuelas, Millape se mantuvo en silencio.

"no fue la forma"

A días del anuncio de Lunari como técnico taurino, el adiestrador Marcos Millape quiso referirse a su bullada situación, manifestando su molestia no por el hecho de su no continuidad -porque eso forma parte del fútbol, dijo- sino por la forma en que se desarrolló esta "teleserie" que terminó con su salida cuando existía un acuerdo con los dirigentes.

-Había un compromiso de los dirigentes del club y todos pensaban que seguiría al mando del equipo. ¿Le dieron alguna razón en la reunión por la cual no estaba considerado?

-Tuvimos una conversación que no fue muy grata, porque tenía la esperanza de que sería ratificado como técnico, porque había un acuerdo de palabra con la dirigencia encabezada por Eduardo González de poder trabajar la temporada 2021, pero no sucedió. En la reunión me indicaron que habían elegido a otra persona y les dije que si bien respetaba la decisión, no la compartía por el compromiso que existía. De hecho hay una foto publicada por el club donde aparece mi imagen como técnico para las temporadas 2020 y 2021.

-¿Cree que la llegada del Grupo Hijuelas fue factor en su salida?

-Sin duda que fue factor. Todos nos ponemos felices cada vez que llegan inversionistas porque es un apoyo financiero importante para la institución y es lógico también que cada persona que inyecta recursos quiera trabajar con su gente... y el fútbol es así, pero lo que yo no comparto fue la forma, porque nunca hubo un llamado ni una conversación conmigo previo a todo esto. Yo sé que la institución llamó a una postulación para enviar sus currículum, pero yo no lo hice... y no por rebeldía, sino porque yo me consideraba el técnico de Provincial Osorno y la dirigencia ya conocía mi plan de trabajo. Aunque no lo envié, igual me citaron a una reunión, pero obviamente fue para que los inversionistas me conocieran como persona y profesional.

-Una semana antes del anuncio ya comenzó a sonar el nombre del

"Lo que yo no comparto fue la forma porque nunca hubo un llamado ni una conversación conmigo previo a todo esto".