Correo
La violencia histórica
En plena "Guerra Fría" del siglo pasado, el Partido Socialista chileno se reunió en su Congreso en Linares el año 1965. Como resultado de sus deliberaciones, acordaron que… "Nuestra estrategia descarta de hecho la vía electoral como método para alcanzar nuestro objetivo de toma del poder" ... Otro punto acordado decía que "El Partido tiene un solo objetivo: para alcanzarlo deberá usar los métodos y los medios que la lucha revolucionaria hagan necesarios…", y también "…La insurrección se tendrá que producir cuando la dirección del movimiento popular comprenda que el proceso social, que ella misma ha impulsado, ha llegado a su madurez y se disponga a servir de partera de la revolución…"
Dos años después, en 1967, el mismo partido marxista se reunió en Chillán en un nuevo Congreso, y entre sus acuerdos destacó que "La violencia revolucionaria es inevitable y legítima. Resulta necesariamente del carácter represivo y armado del Estado de clase. Constituye la única vía que conduce a la toma del poder político y económico y su ulterior defensa y fortalecimiento. Solo destruyendo el aparato burocrático y militar del Estado burgués puede consolidarse la revolución socialista".
En octubre de 2019, los hijos y nietos de Chillán y Linares decidieron retomar la vía violenta en Chile para alcanzar el poder, atacando organizadamente a la policía, incendiando las estaciones del metro junto con iglesias, monumentos nacionales, universidades, hoteles, supermercados, comercios menores, dejando en la ruina y cesantía a miles de chilenos inocentes en Santiago y principales ciudades del país.
En medio del fragor de la lucha callejera el senador Guillier, perdedor en la elección presidencial de 2017, echó bencina a la hoguera proponiendo la renuncia del Presidente y adelantar la elección del Congreso nacional. La historia nos dirá si los hechos violentos fueron un "estallido social" o si fue un golpe de Estado blando.
La pandemia enfrió los ánimos de los violentistas y dio tiempo a las policías para investigar y reunir pruebas, poniendo a disposición de la justicia a numerosos vándalos y delincuentes que cometieron graves daños contra el personal policial y la propiedad pública y privada, los cuales fueron formalizados por la justicia y privados de su libertad
Siguiendo un guión planificado, los senadores de izquierda están presentando estos días un proyecto de indulto para estos delincuentes terroristas, a quienes llaman "presos políticos". Los necesitan nuevamente en la calle porque los acuerdos de Chillán y Linares al parecer siguen vigentes.
Rodrigo Montesinos Vásquez
Manifestantes encapuchados
Los carabineros no actuaron contra los "manifestantes" encapuchados que recientemente quemaron cuatro buses en la Alameda con Las Rejas y una sucursal bancaria en la esquina de calle Moneda con San Antonio, a pocas cuadras del palacio de Gobierno en Santiago, ni anteriormente contra las iglesias de la Asunción y San Francisco de Borja, como debieron haberlo hecho, porque habrían sido imputados como autores de delitos y calificados como un peligro para la sociedad y sus grupos familiares habrían quedado sin sustento.
Adolfo Paúl Latorre
Segunda ola del covid-19
El ministro de Salud augura contextos más complejos en lo que respecta a la evolución de la pandemia y la llegada de la "segunda ola". Proyecta que en el peor escenario se podrían superar los nueve mil casos diarios de contagio, llegándose a necesitar 4.562 camas UCI.
Araceli Echeverría Bickel, académica de la Universidad de los Andes