Dueños de furgones llaman a contratar servicios autorizados por el ministerio
SEGURIDAD. Durante estos días los transportistas escolares se encuentran cerrando los últimos cupos, de cara al inicio del año escolar que parte el 4 de marzo.
Terminan las vacaciones, comienza un nuevo año escolar y los dueños de pymes que prestan servicio de transporte preparan la documentación y acreditación correspondiente para brindar asistencia de primer nivel a los estudiantes y sus padres. Por ello, hacen un llamado a los apoderados para que prefieran el servicio de vehículos acreditados por el Ministerio de Transportes.
Para ser operador de transporte escolar, conductor o asistente, se debe cumplir con documentos que acrediten que la persona cuenta con la facultad para trabajar con niños: certificado de antecedentes e inhabilidad para trabajar con menores de edad.
Posteriormente, deben inscribirse en el Registro Nacional de Servicios de Transporte Escolar (Renastre) del Ministerio de Transportes; de esta manera los padres y apoderados podrán acceder a la información de las personas que transportarán a sus hijos.
"Tengo todo listo en Renastre, de hecho, ando con una carpeta en el furgón con todos los documentos y se las presento a los apoderados antes de empezar a trabajar (...) es importante que los exijan, así los papás saben con quién están encargando a sus hijos", indicó Claudia Bustamante, transportista que recorre el sector Quinto Centenario y Rahue Alto.
Además, la ley exige que las máquinas cumplan con toda la normativa: certificado de anotaciones vigentes en el Registro de Vehículos Motorizados y fotocopia del certificado de revisión técnica vigente y patente única.
"Con la patente del vehículo pueden buscar toda la información de los transportistas y si la máquina está habilitada para trabajar", precisó Christian Padilla, transportista que trabaja en Rahue Alto y Bajo.
Capacidad y precios
Los transportistas se encuentran por estos días cerrando los últimos contratos con los apoderados para alcanzar la capacidad máxima de sus furgones.
La mayoría de las máquinas cuenta con un cupo limitado para 28 niños más uno, espacio que correspondería al asistente del conductor en caso de que se transporte a más de 5 preescolares.
"Me van quedando algunos cupos, porque a mí y a muchos colegas se les cayeron algunos niños productos de lo que pasó a nivel nacional. Si bien no son muchos, estoy haciendo las últimas visitas para cerrar esos contratos", indicó Susana Álvarez, transportista del sector Ovejería.
"Sigo con todos los niños del año pasado y eso me da a entender que hice bien mi trabajo", concluyó Bustamante.
El servicio, que nació por una necesidad de los padres, tiene un costo promedio mensual de 40 mil pesos ida y vuelta por alumno, sin embargo, pagando un valor agregado, algunos empresarios pueden recoger a los niños durante el horario de almuerzo.
"Llevar y traer bordea los $40 mil, no obstante, se puede hacer precio por cantidad de hermanos, pero eso depende de cada empresario y también hay algunos que ofrecen trabajar en horario de almuerzo", detalló Jorge Kleneer, presidente del Sindicato de Transporte Escolar El Coulle.
Fiscalización
Por ley (19.831 Art. 10), los municipios deben tener paraderos establecidos en las distintas instituciones educacionales, pero los transportistas acusan que los apoderados de los colegios se estacionan en los espacios delimitados para ellos y dificultan el procedimiento.
"Tenemos que llegar más temprano para no tener problemas y que los niños bajen o suban tranquilos del vehículo", comentó Bustamante.
Jorge Kleneer, por su parte, indicó que "la fiscalización es malísima, además, pasará marzo y todo el mundo se olvidará del transporte escolar, principalmente los entes fiscalizadores que son Carabineros, los inspectores fiscales e inspectores municipales".
Si bien ninguna de las entidades puede estar fijamente en los lugares, solicitan que cuando los llamen, acudan y hagan lo que corresponde.
"Si no cumplo con la ley, tengo que ser sancionado y cuando ellos no cumplen con fiscalizar, están haciendo abandono de sus deberes", precisa Kleneer.
En el caso de los encargados de bajar a los niños de los vehículos, a veces no pueden hacerlo porque se torna peligroso desde una segunda fila o a una cuadra del lugar.
Con el transporte pirata pasa algo parecido, pues el dirigente sindical concluyó que "es una falta gravísima a la normativa, tan grave que los vehículos que se dedican a esto sin la autorización deberían ser llevados a los corrales municipales y no se hace así, debido a la falta de fiscalización".
"Es importante que los exijan (los documentos), así los papás saben con quién están encargando a sus hijos".
Claudia Bustamante, Transportista escolar
40 mil pesos cuesta aproximadamente el servicio de ida y vuelta de un alumno mensualmente.
Papeles al día es lo que debieran exigir los papás al momento de contratar el servicio, según los transportistas.