Verónica Salgado
El presidente de la Cámara de Comercio e Industrias de Osorno, Juan Horacio Carrasco, sostuvo que confía en la institucionalidad y autoridades que aseguran que actualmente el agua en la comuna es potable, pero que dada la incertidumbre existente en la comunidad, lo más adecuado es que el Ministerio de Salud realice una toma masiva de muestras, cuyos resultados entreguen las garantías que la ciudadanía espera.
El agricultor ha liderado el trabajo que realiza el Ministerio de Economía con los comerciantes para buscar que Essal entregue compensaciones a todos los comerciantes y emprendedores que sufrieron millonarias pérdidas por el corte de agua que se ocasionó tras el vertimiento de petróleo en la planta Caipulli de la firma.
-¿Cómo está la situación del comercio local después de la crisis del agua?
-Presenta un déficit de caja importante, porque en esos más de 10 días que no se pudo producir normalmente, se generó un menor consumo que se traspasó a las ventas generando menor cantidad de dinero circulante que pasará un buen tiempo para que se recupere. Eso llevó a que los comercios más pequeños y aquellos que aún no están consolidados sean los más afectados y tengan problemas para cumplir con sus compromisos financieros, tributarios, entre otros.
-Usted por redes sociales ha enfatizado que el agua es potable, pero la comunidad no lo siente así ¿Qué le garantiza la potabilidad y calidad del agua?
-Somos respetuosos de la institucionalidad y no tengo argumentos para no creer lo que dice la Autoridad Sanitaria y los profesionales de Salud, quienes aseguran que el agua es potable según los análisis y muestras que han tomado. La Universidad de Los Lagos también realizó muestras asociadas a los hidrocarburos que salieron bien, validando que el agua es potable.
-¿Qué le parece que la ULagos no diera a conocer inicialmente el nombre del laboratorio que realizó los análisis?
-Me despierta curiosidad que un laboratorio solicitara algo así y que la universidad haga una declaración sin poder citarlo. Eso es bastante extraño. Si el laboratorio no quiso dar su nombre, el estudio pierde valor.
-Las autoridades han tenido discursos encontrados diciendo 'es potable, pero hiérvala'. En ese sentido, ¿ese llamado suyo incluso a bajar la Alerta Sanitaria vigente hasta fin de mes es sólo para reactivar el comercio?
-Insisto, tenemos que ser respetuosos de la institucionalidad. Si las autoridades aseguran que el agua es potable, no creo que vayan a estar engañando a la población en algo tan delicado. Si llamé a bajar la Alerta es porque afecta, ya que es difícil pensar que una familia quiera visitar Osorno con dudas e incertidumbres sobre la calidad del agua.
-¿Han considerado hacer un llamado al Ministerio de Salud para toma de muestras masivas?
-Se deben hacer todos los esfuerzos posibles para poder entregar certezas, tanto a los ciudadanos de Osorno como a quienes desean visitar la ciudad. El gobierno y autoridades tienen que terminar con ese pimponeo, y si la gente tiene dudas, entonces entregar acciones que los respalden al decir que el agua es potable. Nosotros creemos que es potable, pero existe una sicosis y el único que puede validar la calidad del agua es el gobierno mediante una toma masiva, rápida y seria de agua. Eso debió ocurrir ayer y no estaríamos en esta posición.
Compensaciones
-¿Cómo ha sido la evaluación y trabajo de las dos jornadas de esta mesa liderada por el Ministerio de Economía para compensaciones de Essal al comercio?
-Primero, solicitamos que se evalúe directamente a cada afectado y no un monto solidario que se reparte en igual cantidad para todos. Los personeros del Sernac y Economía acogieron la solicitud y en esa línea se está trabajando para beneficiar con las compensaciones en función de las pérdidas individualizadas. Es perfectamente posible poder actuar en consecuencia de cada comerciante, para lo cual se inscriben y llenan el formulario que dispuso el Ministerio de Economía.
-¿Mantienen la cifra de pérdidas entre 5 y 10 millones de dólares?
-Nosotros tenemos en cálculo perdidas durante esos días de un millón de dólares diarios. Lo importante es que quienes sean socios o no socios entreguen sus datos a través del Ministerio de Economía porque el plazo vence el 23 de agosto. Ahora quienes no se inscriban, quedan fuera de la negociación que estamos realizando, pero pueden recurrir a acciones civiles individualmente.
-¿Confía en que Essal tendrá la solvencia económica para responder?
-Hasta el momento no tengo argumentos para dudar de la palabra de los representantes de Essal. Creo que la empresa actualmente no tiene problemas económicos, sino que su verdadero problema es su reputación y dañada como empresa.
-¿Ustedes como representantes gremiales consideran adecuada la caducidad a Essal?
-En este tema siento que ha quedado un ausente, que es el Estado, el cual debe controlar que las concesionarias realicen un buen servicio y entreguen calidad a las personas. La empresa sin duda tiene que hacer cambios profundos y realizar inversiones para asegurar el abastecimiento de la población.
-¿Considera que el diagnóstico es más empresarial y menos ciudadana que pide la salida de Essal?
-Es posible. Comparto la decepción, la rabia, el dolor porque Osorno sufrió mucho. Es una decisión compleja porque visceralmente uno puede pensar 'fuera Essal', pero debemos pensar quién queda a cargo. Quienes no estamos en la política partidista podemos opinar mucho más libremente porque no necesitamos que nadie vote por mí. La gente que vive de la política trabaja en función de interpretar a la ciudadanía y muchas veces cuando ocurren crisis como esta, se debe distinguir entre las emociones y lo racional.