Joven condenado en Malasia retorna alegando "injusticia"
CRIMEN. Candia cumplía sentencia por homicidio culposo.
Fernando Candia, uno de los dos chilenos condenados en Malasia por homicidio culposo, regresó a nuestro país, tal como lo hizo su amigo, Felipe Osiadacz, en abril último.
"Cumplí íntegramente la sentencia de pena efectiva, pero la Fiscalía quería alargar el caso. Desde el primer momento, quise que este proceso se cerrara de la manera correcta y que se confirmara la desición del juez a cargo del caso, quien dictaminó una sentencia de dos años. Después de analizar la información y el consejo de importantes abogados malayos, asumí que la estrategia de la Fiscalía era alargar indefinidamente el caso. Frente a esta injusticia, decido volver", dijo Candia en la Municipalidad de La Florida, acompañado por el alcalde Rodolfo Carter, quien apoyó al joven tras enterarse del caso y de que es floridano.
"Nadie puede ser condenado sin un juicio previo y todos merecen un juicio justo. Claramente los chilenos sabemos que el juicio en Malasia estaba teñido de un montón de irregularidades y el riesgo que había para su seguridad y para su vida era lo que atormentaba a su madre", sostuvo Carter.
"En los momentos más difíciles siempre sentí la preocupación de miles de chilenos, hoy desde la Municipalidad de La Florida, que nos ha dado su permanente respaldo (...) Espero que termine -definitivamente- la pesadilla que yo y mi familia hemos sufrido", manifestó Candia, quien pidió que no se condene a Osiadacz, pues solo ellos saben "lo difícil y doloroso que ha sido esto".
"Quiero citar las palabras del juez que dictaminó la sentencia: estuvimos en el lugar, hora y momento equivocado", finalizó el joven.
Candia y Osiadacz fueron detenidos en Malasia en 2017, tras ser acusados de homicidio de una mujer trans en un incidente en las puertas del hotel donde se hospedaban.
Ambos, que estaban de vacaciones en ese país del sudeste asiático, estuvieron casi 16 meses recluidos en una cárcel de Kuala Lumpur. Durante el juicio, se declararon culpables del delito de homicidio culposo contra la ciudadana malasia, por lo cual se les condenó a dos años de prisión.
Los dos se hallaban con libertad vigilada a la espera de que se resolviera una apelación de la Fiscalía de Malasia. En esa circunstancia regresó, en abril pasado, Osiadacz.