Comienza la carrera para llegar a la Fiscalía Regional de Los Lagos
CANDIDATOS. En julio se realiza el llamado a concurso y ya surgen varios nombres de quienes quieren dirigir el Ministerio Público. Dos ex fiscales y dos ex defensores penales públicos opinan sobre los desafíos del próximo persecutor regional y critican la falta de materia técnica en la dirección.
Siete son los nombres de conocidos abogados, posibles postulantes al cargo de fiscal regional de Los Lagos, que están sonando en el plano jurídico y que buscan quedarse en el sillón que hasta hoy es ocupado por Marcos Emilfork Konow.
Emilfork tendrá que dejar el cargo en octubre próximo, después de ocho años de un mandato que tuvo distintos componentes, de acuerdo a quienes han trabajado con él, gestión en la que faltó -para ex defensores penales públicos- "el componente técnico".
Los delitos sexuales, que afectan especialmente a menores de edad, y los de violencia intrafamiliar (VIF) fueron y son temas abordados plenamente por el fiscal regional, creando instancias que van más allá de lo penal, en los que los números siguen preocupando.
De acuerdo a la última cuenta pública correspondiente a la gestión 2018, dada a conocer por el fiscal Emilfork en enero pasado, en la región ingresaron mil 761 casos por delitos sexuales, un 14,1 por ciento más que el año anterior.
Los delitos más denunciados en 2018 fueron abuso sexual y violación, ambos de menor de 14 años.
Respecto a los llamados delitos de género, violencia intrafamiliar, en la misma cuenta dio cuenta que en la región registraron cinco mil 696 casos, un 0,7 por ciento menos que el año 2017. A nivel histórico, las denuncias de esta categoría de delitos desde el año 2012 muestran una disminución de un 20,2 por ciento.
Candidatos
Como el cargo del actual fiscal regional expira en octubre de este año, han surgido varios nombres que podrían ser parte de esta postulación que se inicia a través de un llamado a concurso, a fines de julio.
Este proceso se debe hacer 90 días antes que termine el actual período.
De los seis nombres conocidos hasta esta fecha, sólo uno sería de fuera de la región. Se trata de Rolando Melo, actual jefe de la Unidad de Delitos Sexuales de la Fiscalía Nacional.
Al abogado capitalino se sumarían Carmen Gloria Wittwer, ex fiscal de Puerto Varas, quien en la actualidad se desempeña como abogada asesora de la Fiscalía Regional.
Además de Enrique Canales, fiscal jefe de Castro, en Chiloé; Leyla Chahín, fiscal jefe de Río Negro, en la provincia de Osorno; Marcello Sambuceti, fiscal jefe de Puerto Montt; María Angélica de Miguel, fiscal jefe de Osorno; y, Nain Lamas, ex fiscal jefe de Puerto Varas y actual jefe de la Unidad de Análisis Criminal (Sacfi) en la capital regional.
La mayoría son conocidos en el plano penal y mediáticos en sus distintas funciones, especialmente quienes desempeñan cargos en jefaturas de las fiscalías.
Recursos
El ex fiscal Sergio Coronado, tiene una buena impresión de la labor del fiscal regional Marcos Emilfork, pero para el penalista, debería aumentar el recurso humano.
Independiente del tema de las condiciones o capacidades, que ya todos los fiscales las tienen, para Coronado "será especialmente necesario que él o la fiscal regional que asuma, tenga presente los nuevos desafíos que se vienen, a propósito de ciertos fenómenos que han estado presentes en los medios en los últimos tiempos y la situación relativa al nuevo Código Penal".
El abogado recordó que el ministro de Justicia Hernán Larraín, anunció un proyecto de nuevo Código Penal, en el que se impone una serie de figuras, como el delito medio ambiental, lo relativo a las redes sociales y nuevas tecnologías.
"Se vienen muchos desafíos para la Fiscalía a nivel regional. A esas realidades tendrá que hacer frente el nuevo fiscal regional. El trabajo tendría que ser reforzado con recursos humanos y físicos, que permitan desarrollar esta labor y que a nivel externo las policías puedan mejorar su capacidad y calidad investigativa, especialmente en los delitos relacionados con redes sociales. A ello se suma el fenómeno de la migración, con prácticas delictivas que no estaban presentes en el país", apuntó.
Coronado tiene una buena imagen de la gestión de Emilfork. "Deja la vara muy alta, porque lo que se puede percibir como un interviniente del sistema, es que ha tratado de imprimir una señal importante con las víctimas, y ello se ha notado en la persecución penal y las penas que se han obtenido. Es destacable por la forma cómo la Fiscalía trata a las víctimas y las incorpora al proceso penal", anotó.
Delitos
El ex defensor penal público de Puerto Montt, Nofal Abud, dijo que el perfil del nuevo fiscal regional debiera responder a un profesional con amplia experiencia en materia penal y un acabado conocimiento, no sólo de la Fiscalía, sino que del sistema procesal penal en su conjunto, "favoreciendo de esta forma una adecuada coordinación interinstitucional", estableció.
Para Abud, la duración del cargo de ocho años parece razonable, en el entendido que ello permite efectivamente ejecutar un plan de trabajo con determinados énfasis y verificar los resultados al término de ese periodo.
En cuanto a la gestión del fiscal regional saliente (Marcos Emilfork), el abogado penalista opinó que le parece destacable el esfuerzo desplegado en materias de coordinación con diversas organizaciones locales, tanto públicas como privadas, tendiente a la prevención del delito.
"Es esperable de la nueva autoridad máxima del Ministerio Público en la región, un énfasis en el trabajo tendiente a la disminución de delitos de alta connotación pública y prevalencia en la zona, como lo son los femicidios y la violencia intrafamiliar", afirmó.
Escuchar
De acuerdo a la opinión del ex fiscal, Rodrigo Tejos, además de los requisitos legales que se exigen para ser nombrado en el cargo, el fiscal regional debe ser un líder positivo, una autoridad colaborativa y un jefe orientador y receptivo.
De acuerdo a Tejos, quien ocupe el cargo de fiscal regional debe ser capaz de fomentar y potenciar el trabajo colaborativo de equipos, "tanto al interior del Ministerio Público, como con las distintas entidades de la administración de justicia (tribunales, policías, Defensoría y Gendarmería, entre otros), con las que se debe acordar y mantener canales de comunicación y coordinación permanentes. La solución al fenómeno de la delincuencia no se puede reducir a la sola sanción en contra de quien delinque", determinó.
Para el penalista, el jefe regional del Ministerio Público debe visualizar al servicio como un actor social, localmente gravitante, "preocupado de escuchar y articular el diálogo con los distintos líderes y representantes de las organizaciones y comunidades de la zona (autoridades, empresarios, organizaciones sociales y agrupaciones vecinales) quienes, no sólo son (o han sido) usuarios del sistema, sino que también tienen una opinión acabada y respetable sobre el accionar del Ministerio Público", acotó.
De acuerdo al abogado, nunca hay que perder de vista que las Fiscalías Locales forman parte del servicio público, que están insertas dentro de un engranaje social y forman parte de una comunidad local determinada.
"Quienes trabajan en el Ministerio Público también son vecinos, apoderados, clientes y consumidores del comercio, usuarios de los distintos servicios, al igual que el resto de los habitantes de las comunas que forman parte de esta región. La forma cómo se resuelva un conflicto penal determinado, también tiene incidencia en esas dinámicas locales. En este sentido, el desafío de quien detente la jefatura de la Fiscalía Regional, no se limita al mero cumplimiento de metas institucionales, sino que se debe dar un paso cualitativo adicional y verificar si esas metas favorecen efectivamente a las víctimas y demás usuarios del sistema", manifestó.
Objetividad
El ex defensor penal público Andrés Firmani, profundizó en las cualidades profesionales que debería tener el futuro fiscal regional.
Para Firmani se necesita una persona con mucha experiencia en materia penal. "Siempre he sido de la idea que un fiscal regional no puede ser muy joven. Éste debería ser una persona que pudo ser un fiscal, un litigante que haya llevado investigaciones y tramitado causas penales. No debe ser un político, tiene que ser un ente técnico, un abogado que entienda lo que significa la persecución penal y que se ponga siempre en el escenario que cuando se construye una persecución penal, también se afecta por el otro lado a una persona que se le puede destruir la vida".
Según el abogado penalista, la condición esencial de un fiscal regional es la objetividad por sobre todas las cosas, y una templanza y mesura "para no llevar investigaciones exabruptos; es decir, con sólo versiones de víctimas, porque ello no es suficiente. Para respaldar una investigación penal, fuera de la víctima se necesita pruebas y éstas son las que objetivamente deberían llevar adelante una persecución penal, pero no sólo el interés de un grupo de personas", aseguró.
Firmani dijo que la gestión de Emilfork no ha sido mala, pero tiene sus reparos.
Recordó que profundizó en el fuerte eslogan de estar siempre con las víctimas, lo que generó una persecución penal parcializada, "muy inclinada de forma ciega a las víctimas, sin medir las consecuencias. Con ello se ha atentado en varias causas emblemáticas (caso Haeger) en la presunción de inocencia y sobre todo con la dignidad y honra de las personas, al punto que muchas que han sido absueltas en causas, debieron enfrentar una larga persecución penal, de uno a tres años, que le destruyeron la vida y de lo que hoy en día no se pueden reparar".
Para el penalista, se debe acompañar a la víctima "en la medida que exista prueba que la respalde, porque muchas veces las víctimas -por interés espurio- mienten e inventan denuncias y al cabo se comprueba que esto no es así. Esa marca de Emilfork de haberse posicionado a ultranza con las víctimas. Me parece que es poco objetivo y atenta contra la objetividad del cargo de la persecución penal, porque siempre debe ser técnica", adujo.
Firmani insistió en que existen ciertas causas que se han mantenido abiertas durante mucho tiempo "que más que nada tienen mucha vinculación política o ideológica, que se han desorientado en la parte técnica. Estas causas se han alejado de lo técnico, de lo que es comprobable. Me parece que es una persona (Marcos Emilfork) muy accesible y agradable y creo que no fue una mala gestión", relató.