Semáforos y el municipio
A través de la presente me permito responder a la carta enviada por Marcelo Mora dirigida al alcalde (Jaime Bertín), enrostrándole si espera chocar para hacer que comiencen a funcionar los nuevos semáforos del proyecto SCAT, que ejecuta el Serviu.
Primero, me parece una falta de respeto plantear a una autoridad una legítima inquietud ciudadana tal como lo hizo el señor Mora. Suponer que "el alcalde está esperando chocar para decir que ahora se pueden prender" los semáforos, junto con no hablar bien del mismo Marcelo Mora, evidencia una ignorancia lacerante respecto del funcionamiento de las instituciones y sus competencias.
Sepa usted, don Marcelo, que éste es un proyecto Serviu financiado por el Ministerio de Transportes. Nada tiene que hacer el municipio en su ejecución más que mitigar, como pueda, su impacto vial. Le recomiendo informarse mejor antes de opinar y denostar a los demás gratuitamente.
Permítame sugerirle, además que lejos de tener vergüenza por ver dichos semáforos ya instalados y apagados, siéntase tranquilo de que el Serviu mantiene todos los aparatos instalados dentro del plazo pactado con la empresa. Si aún están apagados es porque pronto comenzará la necesaria sincronización de los mismos.
Dice no saber qué está esperando el alcalde para hacerlos funcionar. Déjeme decirle que espera precisamente que la institución a cargo entregue la obra terminada y dentro de los plazos. Déjeme agregarle también, porque me consta, que no espera nada más que dejar al final de su gestión una ciudad moderna, pujante y con los mejores estándares en todos los ámbitos de su competencia, mal que a quienes prefieran el bucólico Osorno de antes les pese.
Al terminar, le agrego que los reportes de la Conaset informan que el 80% de los accidentes de tránsito se producen por exceso de velocidad y no por culpa de los semáforos. Se lo digo porque puedo suponer que no lo sabía.
Hablaremos con el alcalde para que se evite un accidente de tránsito y así no se sienta usted culpable por sus buenos deseos.
Luis Vilches, director de Tránsito de la Municipalidad de Osorno
Consumismo y Navidad
El consumismo y el poder del dinero son expresiones netamente paganas y distorsionadoras de lo que debe ser el verdadero sentido y espíritu navideño, ya que no se puede adorar y servir a dos señores a la vez, al dios del dinero, reflejado en el consumismo desenfrenado como perverso, y al Dios de los cristianos, reflejado en el nacimiento del Niño Dios en un humilde y sencillo pesebre.
Carlos Angulo Benavides
Diputados y 2 de enero
¿Van a tener resaca los políticos que no pueden trabajar desde temprano el martes 2 de enero? Flaco favor le hacen a la tan desprestigiada política, el establecer privilegios sólo para ellos, mientras los "ciudadanos de a pie" siguen trabajando por el país.
Esteban Montaner Rodríguez
Diputado Hugo Gutiérrez I
Polémica generó un tuit del diputado Hugo Gutiérrez (Partido Comunista) que tilda de "idiotas" a votantes de Sebastián Piñera. ¿Qué más se puede esperar de un comunista criollo? Yo me quedo con la frase de Don Quijote de la Mancha: "Deja que los perros ladren, Sancho amigo, significa que vamos avanzando".
Gutiérrez, como buen comunista, no hace más que repetir el evangelio de Karl Marx, que puede resumirse así: "odia a quien está mejor que ti. Bajo ninguna circunstancia admitas que su éxito puede deberse a su propio esfuerzo, a la contribución productiva que ha hecho a la vida de otros", Henry Hazlitt, periodista norteamericano.
Mauricio Pilleux Dresdner
Diputado Hugo Gutiérrez II
El diputado Hugo Gutiérrez justificó haber tratado de idiotas a los ciudadanos que votaron por Piñera aludiendo al sentido griego del término, diciendo que: "no hay ciudadanos, hay consumidores. Lo que están buscando es que alguien les dé algo".
En su explicación, hay algo que olvida, los idiotas estaban entre aquellos que eran consideradas bestias carentes de virtud política e incapaces de usar la palabra, como ocurría con los extranjeros, las mujeres y los esclavos. Por eso, eran excluidos de la política y la democracia.
Su apelación, para criticar a ciudadanos que ejercieron su voto a favor de Piñera, es contradictoria con lo que dice promover, pues finalmente justifica sus dichos en base a un concepto clásico profundamente elitista. Porque lo que está diciendo el diputado es que no todos deberían ser partícipes de la democracia.
Nada extraño de quien promueve una ideología que presume que los pueblos requieren una vanguardia que la guíe como los pastores a las ovejas. No tiene prudencia, una virtud política esencial para los griegos.
Jorge Gómez Arismendi