Paola Rojas

Sobre un escenario que presenta una abundante producción de papas este año en el país, generada por el aumento en las precipitaciones, se desarrolla en el Hotel Sonesta de Osorno el XII Encuentro Nacional de la Papa, donde asisten especialistas en el tema que debaten sobre los actuales desafíos en la producción de este tubérculo.

La reunión que realiza cada tres años la Asociación Chilena de la Papa (Achipa), junto al Consorcio de la Papa e Inia, este año tiene un énfasis especial, por las circunstancias que vive el cultivo y por las necesidades que tiene de un cambio en diferentes aspectos, como el sanitario, comercial y el valor agregado. Precisamente, este último es un tema que en el país está muy poco desarrollado, por lo que el seminario busca el análisis para llegar a un consenso sobre las medidas que se deben adoptar en el rubro a corto y mediano plazo.

En esta oportunidad el encuentro, que ya tiene 34 años, apunta principalmente a ver las formas de procesar este elemento y así abrirse a otros mercados, ya que hoy en día es prácticamente solo un producto de bajo valor, al que no se le ha aprovechado el potencial como en otros países, ya que se vende en ferias o supermercados prácticamente en bruto, siendo un tubérculo de gran calidad, sobre todo el que se desarrolla y produce en esta zona del país, con características que lo harían competir en mercados extranjeros.

Industrializar

Víctor Hugo Gómez, presidente de la Asociación Chilena de la Papa, destacó que la papa es un cultivo tremendamente importante en el país, no solo en su volumen de producción, sino también en lo económico, por lo que en el congreso se comparte la última tecnología para desarrollar el área y en lo agroquímico.

Además, explicó que una de las vías para mejorar el rubro es la industrialización, ya que no hay problemas de producción en Chile, porque siempre es abundante y para eso no hay suficiente consumo y con ello bajan los precios.

Por ello, con la industrialización de la papa se podría mirar hacia otros mercados, ya que a nivel local se producen tubérculos de alta calidad, que puede competir con los de otras naciones productoras del primer mundo, pero que cuentan con un desarrollo del procesamiento de este vegetal.

"Por qué no exportar papa industrializada a Asia, donde tenemos tratados de libre comercio que nos permitirían dar un mayor valor agregado al producto", manifestó Gómez.

Agregó que pese a la gran producción, Chile es un país importador de papa, donde llegan productos procesados por razones de orden cultural, respondiendo a una necesidad de ahorro de tiempo, ya que los consumidores prefieren productos casi listos para una fácil elaboración en casa.

"Las dueñas de casa compran papas industrializadas, prefritas, la idea es que sea para llegar, hervir o freír. Tenemos un desafío como país".

Sobre los motivos de por qué Chile no ha avanzado en la industrialización del sector, Gómez señaló que se deben a la falta de estudios de mercado y apoyo de orden estatal para ello y para entregar créditos como personas individuales y colectivas.

"Creemos que Chile tiene las condiciones, al igual que Holanda, un país pequeño, equivalente en tamaño a las provincias de Llanquihue u Osorno, pero donde producen 7,5 millones de toneladas de papa al año, mientras que nosotros producimos solo un millón y medio".

Potencial e intercambio

Uno de los invitados a cargo de abrir este evento es el embajador de Holanda en el país, Harman Idema, quien se refirió a la importancia de salir con este producto hacia otros países.

Aseguró que Chile tiene un mercado bastante desarrollado para ello, ya que a su juicio trabajar con el gobierno y las empresas es fácil, por lo que el clima de negocios que existe resulta muy agradable para los holandeses, lo que hace un polo muy atractivo para que las firmas de ese país lleguen a Latinoamérica.

"Para nosotros Chile es lejos y Holanda es muy lejos para los chilenos, pero en el área de la papa Holanda tiene un gran conocimiento, somos el mayor exportador de papas procesadas. Tenemos una colaboración entre el gobierno, el sector privado y el sector científico, que nos hace muy innovadores en el tema, por lo que podemos ofrecer a Chile oportunidades para trabajar en conjunto", indicó el embajador.

Detalló que estas alternativas pueden ser a través de la inversión, envíos e importación, colaboración para mejorar la calidad, entre otras áreas.

Entre las oportunidades que ve en el país, y que no han sido desarrolladas tal como en Holanda, está la disponibilidad de papas en el supermercado que traigan especificada la variedad a la que pertenecen, para cuando el consumidor llega a prepararlas, sepa de sus características y ventajas.

Con este tipo de especificación mejorarían los precios, los que calificó como bajos, por lo que se debe establecer un estricto sistema de monitoreo para revisar la producción, ya que producir una variedad tiene un alto costo, por lo que hay que resguardarla.

"En Chile se debe desarrollar muy bien este monitoreo, porque si no existe, será mucho más difícil desarrollar un mercado como el que me refiero", señaló.

Control sanitario

Por su parte, el director regional del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), Andrés Duval, destacó el programa nacional de la papa que desarrolla esta entidad y que básicamente se aplica en la Región de Los Lagos y también más al sur, por la importancia de los cultivos locales, no solo en cuanto a su productividad, sino que también por su arraigo cultural.

Sobre los riesgos sanitarios de la papa, tema primordial cuando se piensa en la apertura de otros mercados, resaltó de que la zona sur de Chile está declarada como una zona prioritaria para la producción de semillas, ya que las condiciones así lo permiten, porque hasta ahora hay una baja incidencia de enfermedades.

No obstante, Duval advirtió que esta condición ha ido transformándose debido al cambio climático, con un aumento de temperaturas, lo cual debe enfrentar el SAG.

Precisó que dentro del área libre se han detectado algunos focos de enfermedades cuarentenarias del tubérculo, que están siendo controladas para evitar un brote masivo, sobre todo por el estatus internacional que tiene esta región como productora de semillas.

Sobre las condiciones de la producción papera nacional, frente a las posibilidades de su salida hacia mercados extranjeros, el director regional del SAG indicó que actualmente existe una línea de productores que se dedica a la exportación, principalmente en la generación de semillas, que es además el potencial más grande que existe para el comercio exterior.

También hay potencial para la exportación de papas de consumo, especialmente con países vecinos como Argentina, Brasil o Uruguay, que están más cerca y donde se puede llegar con más facilidad.

"El potencial que está teniendo el país, lo que hemos visto y lo que están desarrollando muchas empresas en la región, es la producción de semillas para la exportación y que cumplen con los estándares no solo sanitarios, sino que también de calidad, que son demandados en países de Centroamérica", concluyó Andrés Duval.

"Por qué no exportar papa industrializada a Asia, donde tenemos tratados de libre comercio que nos permitirían dar un mayor valor agregado al producto".

Víctor Hugo Gómez

Presidente de Achipa"

"En el área de la papa Holanda tiene un gran conocimiento, somos el mayor exportador de papas procesadas".

Harman Idema

Embajador de Holanda"

34 años de duración comprende esta actividad, donde se presentarán distintos expositores, tanto chilenos como holandeses y norteamericanos.

lleva realizándose en el país el Encuentro Nacional de la Papa, donde en cada versión se trabajan los distintos desafíos que implica el rubro. de toneladas de papas produce Chile en un año, mientras que Holanda produce 7,5 millones de toneladas. Este pequeño país tiene una superficie similar a la provincia de Osorno.