Un importante desafío logró cumplir el deportista osornino Francisco Ojeda de 24 años, técnico en Enfermería en la Clínica Alemana de Osorno, junto con su compañero Sergio Levicoy, de 27, guardaparques de Conaf en el Parque Nacional Alerce Andino, quienes se encuentran en Perú descansando tras subir dos importantes macizos.
Los dos montañistas partieron el martes 26 de julio con destino a Lima, con la intención de ascender el nevado Urus, de 5 mil 500 metros sobre el nivel del mar y luego el nevado Tocllaraju, de 6 mil 30 metros, ambas importantes montañas de la Cordillera Blanca de Perú.
Según relata Ojeda, llegaron hasta la ciudad de Huaraz, al norte de Lima que es la capital del montañismo peruano, para luego tomar locomoción terrestre que los llevó hasta el inicio del sendero del valle de Ishinca.
"Luego de varias horas caminando a través del valle, llegamos al campamento base del Valle de Ishinca, el cual está a 4 mil 350 metros de altura, lugar preciso para iniciar la aclimatación", dijo el montañista osornino.
Comenta que como sabían que se avecinaba condiciones meteorológicas adversas, decidieron adelantar el ascenso al nevado de Tocllaraju,
"Sorpresivamente una tormenta hizo que nos devolviéramos hasta el campamento base. Ya que aún quedaban días y el mal clima sólo estaba en la montaña ya mencionada, decidimos ascender a nuestro segundo objetivo que era el nevado Urus. Emprendimos el ascenso desde el campamento e hicimos cumbre después de 6 horas de trabajo en altura", agrega.
La mayor dificultad fue superar la falta de oxígeno, ya que disminuye en un 50% aproximadamente.
"La paciencia, la preparación física y psicológica, son fuertes componentes para lograr tal hazaña", dijo Ojeda, indicando que la experiencia fue increíble.
"Compartimos con montañistas de todo el mundo, nos tomamos unas cervezas, contamos historias. Incluso con unos chilenos que conocimos, jugamos un partido de fútbol contra los guías peruanos, lo cuales obviamente nos ganaron ya que están mas acostumbrados a la altura porque fue a 4 mil 350 metros sobre el nivel del mar", dijo vía correo electrónico.
Pasión
Francisco Ojeda comentó que junto a Sergio se prepararon física y mentalmente para realizar estos ascensos.
Económicamente contaron con la ayuda de la Tienda Grunen de Osorno y la empresa de arquitectura Deweek Chile Limitada, quienes creyeron en su proyecto de ascender montañas en Perú.
"Hemos subido casi todas las montañas de la zona, ahora nuestro próximo objetivo es escalar el volcán Puntiagudo, uno de los ascensos mas difíciles de Chile", dijo Ojeda.
Agregó que con Sergio Levicoy son amigos desde hace unos 2 años porque se conocieron escalando el volcán Calbuco, por eso las montañas tienen un significado de amistad, compañerismo y trabajo en equipo.
"En lo personal el llegar a la cima de las montañas es estar un poco más cerca del cielo, ya que allá tengo un ángel, mi hija que falleció hace unos meses atrás y quien es mi motivación para poder estar más cerca de ella", comentó emocionado el montañista osornino.
"La paciencia, la preparación física y psicológica, son fuertes componentes para lograr tal hazaña".
Francisco Ojeda, Montañista local"
horas se demoraron en lograr el ascenso a este macizo los dos montañistas sureños. 6