Camión del Ejército sin frenos
El pasado miércoles, a las 13:20 aproximadamente viniendo desde mi trabajo, un colegio cercano, he vivido una experiencia -que espero- nunca se vuelva a repetir, y es por esto que se me vuelve un deber compartirla. Socializo el relato que hice público esa misma tarde en la red de Facebook.
"Estoy muerta, ¡casi muerta! Y he vuelto a la vida en segundos. En el paso cebra ubicado en las calles Barros Arana con Manuel Antonio Matta, un camión gigante de nuestro Ejército de Chile hizo como que frenó... pero no lo hizo, y yo confiada crucé y ¡saz!, me hizo el quite subiéndose casi a la esquina (hay testigos varios que quedaron boca abierta)".
Por esa maniobra no fui arrasada por el camión. Quedé helada y ahí mismo los fui a encarar. Como el camión se dirigía hacia el recinto militar, y la muerte me había mordido los tobillos, seguí sus pasos para entrar, buscar al chofer, que estaba bajándose, y preguntarle el motivo de su irresponsabilidad. El diálogo que se produjo lo narré así:
- Yo: ¿usted es el chofer de esto?
- Él: Señora, sí, venimos con los frenos malos.
- Yo: ¿y por qué no le hacen mantención antes de salir a atropellar chilenos?, ¿o entonces se vienen a pie no más, no pueden caminar?, andar así, ¡cerca de un colegio!, en una calle donde pasa tanto niño. Y cuál es la explicación. ¡ Quiero a su superior!
Aparece el superior, que salió a justificarlo: No tenemos recursos para arreglar los camiones, mire nuestro portón, en el suelo.
Yo: ¿y qué quiere, que le mande un soldador? ¿En qué gastan los recursos?, ¿quién se gasta los recursos?, ¿es acaso como dicen las noticias? Y si no tiene buenos los camiones: ¡no salga a la calle, pues caballero! a arriesgar a los que ponemos la fe en nuestro Ejército; casi me mata, y no me sirven sus disculpas después de muerta, y no se las acepto, menos a una institución tan importante como nuestro Ejército.
Esta situación de no respetar el paso cebra se hace a diario (y lo veo), cualquier conductor sea irresponsable, ignorante, volado, nada empático (no lo justifico, pero no es tan extraño), pero no un camión de gran tonelaje, a alta velocidad, y de nuestro Ejército de Chile.
Nadie dijo nada, parecían niños reprendidos. Salí y emprendí mi rumbo llorando, y dando gracias a Dios, aún no es mi tiempo; preguntándome: Y ahora, ¿quién podrá defenderme?
He querido hacer pública esta situación, a la vez que presentar los reclamados pertinentes en los conductos regulares, pues en ese perímetro, en que el camión de militares se movía "sin frenos", se encuentran tres establecimientos educacionales. Son miles los niños y adultos que transitamos por ahí, y no nos merecemos quedar al arbitrio de la "buena suerte" en el funcionamiento de vehículos de carga pesada. Más aún, si pertenecen a una institución de todos y todas las chilenas.
Hilda González Molina, licenciada en Educación Musical, gestora cultural para la primera infancia y cantautora
Recorte de estufas
Al postergar la asignación de recursos de los calefactores que se iban a entregar en Osorno para el año 2017, queda de manifiesto el poco interés y peso político que tienen nuestros representantes en la zona.
Siempre hemos sido postergados por los gobiernos de turno. En el de Piñera fue el estadio y el Parque Hott; mañana será un nuevo puente o una avenida.
¿Por qué no postergan una nueva línea del Metro o una carretera sobre el Mapocho.
Siempre gobernando con ideas centralistas no vamos avanzar con una real descentralización que tanto se lo merece nuestro país.
Walter Carmona Cheuquian
Desempleo en Chile y el mundo
Hace pocos días se publicaron las cifras inesperadamente magras de desempleo: un 6,3%, lo que significa un aumento de 0,4% respecto del año pasado. El Gobierno inmediatamente salió a explicar que se debía al escenario externo.
Ese mismo día también aparecieron las cifras de desempleo de la mayor economía mundial: la Unión Europea. Si bien el porcentaje es bastante superior, con un 10.2%, el desempleo ha disminuido en 0,9% en el mismo período de tiempo que en Chile aumentó. Similar situación en Estados Unidos, donde el desempleo tuvo una disminución de 0,4% puntos porcentuales a un 5,0%.
En Japón también hubo un descenso en el desempleo, de un 0,1% hasta el 3,2%. La tasa de desempleo en China disminuyó tan poco que para efectos prácticos se mantuvo estable.
La combinación de esos países representa más del 60% del PIB mundial, y todos con desempleo estable o a la baja. Que Chile no esté ajeno al escenario extranjero llama la atención, porque nuestra situación de desempleo se está desmarcando de la tendencia global.
Daniel Grady