"Tenía que jugar un osornino por Deportes Valdivia para que el equipo de al lado saliera campeón", decía un hincha local tras ver por televisión cómo el cuadro del Calle Calle, tras 15 años sin títulos, se coronaba monarca de la Liga Nacional de Básquetbol.

Este comentario hacía alusión a la importancia que tuvo en la obtención de este título el base osornino de 32 años, Erik Carrasco, quien fue el líder de la campaña de los valdivianos que se impuso 4-2 en la serie final ante la Universidad de Concepción. En el sexto juego disputado la noche del domingo en el Coliseo Antonio Azurmendi, los locales se impusieron 83 a 79.

Precisamente los últimos dos puntos los convirtió "Cachete" -vía lanzamiento libres- cuando restaban 6 segundos para el término del partido, por lo que cuando sonó la "chicharra", los jugadores valdivianos, incluido Carrasco, se abrazaron eufóricos mientras los miles de hinchas agolpados en el recinto deportivo festejaban este título.

Ayer, ya más tranquilo después de los festejos, el base osornino que logró su sexto título nacional, se mostró contento por el logro, sobre todo por sus compañeros y por los hinchas que desde el primer momento acompañaron al elenco sin pensar en que conseguirían este hazaña.

Balance

¿Cómo vivió esta temporada jugando por Deportes Valdivia?

-Sólo viví cosas buenas acá, aunque en un comienzo hubo cierto recelo para que yo llegara. Pero venía con buen juego y físicamente bien, pero hay cosas que no todos saben porque en lo personal y emocional fue complicado porque mi hijo pequeño (Lucas de 5 años) se quedó en Santiago y lo veía una vez al mes hasta que en diciembre recién lo tuve acá. Tuve que sobreponerme a eso, pero en lo deportivo fue una gran temporada que queda en evidencia con la obtención del título de la Liga Nacional. En el balance, fue una tremenda temporada.

-¿Qué es lo que más destaca de la campaña con los valdivianos?

- Lo principal es que el equipo salió campeón luego de 15 años (2001 fue su última corona). Valdivia es una ciudad que disfruta con el básquetbol, aunque durante años no existía el apoyo necesario. Destaco que se reencantó a la gente y en lo personal contento porque mejoré mucho mi juego, fui mucho más ofensivo, pero tuve que esforzarme más por la presión que había en mí. Además destaco la confianza que me dio 'Manu' Córdoba, debido a que eso es fundamental porque permite lograr este tipo de títulos.

-¿Cuando arribó a Valdivia se sintió con la responsabilidad de ser el líder del equipo?

-Sí, sabía que iba a existir una presión extra sobre mí o que yo llegaba para ser un líder y sumar para que el equipo obtuviera algo importante. El objetivo quizás a principio de año no era ser campeón, era clasificar a playoffs e ir paso a paso, pero sabía que con el plantel que teníamos podíamos aspirar a más y lo hicimos.

-Junto con el rendimiento que tuvo el equipo, ¿cree que la expulsión de Patrick Sáez tras una agresión debilitó a la Universidad de Concepción?

-No sé si los debilitó, pero él es un jugador importante para la UdeConce debido a que le da manejo de juego, aunque también le quitaba cosas como correr más, entonces es una por otra. Lo más meritorio es que nosotros teniendo un elenco más corto, nos paramos de igual a igual, y con actitud y garra lo sacamos adelante.

-A su juicio ¿esta fue su mejor temporada en lo individual?

-Fue una gran temporada. Quizás en otras estuve más bajo pero en esta fui más determinante, más ofensivo en mi juego, pero yo pienso más en el equipo que en mí. Juego para que mi club consiga cosas.

Futuro

-¿Cuáles son sus planes tras este título?

-Ahora tengo tres semanas de vacaciones y quiero disfrutarlas con mi familia y amigos. Estaré diez días en Chile y los otros fuera del país, para luego ver qué se viene. Tengo que tomar una decisión pensando siempre en el bienestar de mi familia. Mi gran deseo es estar en Santiago, pero se ve complicado.

-¿Le gustaría jugar por Osorno Básquetbol?

-Obvio que sí, las ganas siempre van a estar, pero como te digo, no quiero adelantarme a nada. Quiero celebrar con mis compañeros ahora porque son momentos únicos, estar con mi familia y amigos, comer unos buenos asados (ríe) y desconectarme un poco de lo que es básquetbol. Con el correr de las semanas veremos qué pasa a futuro.

32 años de edad tiene el jugador osornino que logró su sexto título como profesional

3 semanas de vacaciones se tomará Erik Carrasco mientras escucha ofertas para la temporada 2016.