Las personas omiten el factor clave para el éxito de una dieta
ALIMENTACIÓN. Según un estudio, la mayoría no se preocupa de sus emociones ni de su estado mental al proponerse perder peso.
Carolina Collins redaccion@mediosregionales.cl
Cuando alguien se propone bajar de peso, por lo general piensa en alguna rutina de ejercicios y en cambiar sus hábitos alimenticios con una dieta baja en calorías. Sin embargo, investigadores advierten que eso es un error, porque la clave para la efectividad de una dieta estaría en la mente.
Los expertos indican que la mayor parte de las dietas para perder peso fallan porque las personas dejan fuera los aspectos emocionales de la comida.
Según reveló una encuesta realizada a nivel nacional en Estados Unidos por la fundación Orlando Health, que se dedica a temas relacionados con el cuidado de la salud, al hablar de dietas, el 90% de los encuestados dejaron fuera la mente, que es el aspecto fundamental para bajar de peso.
La neuropsicóloga y directora del Programa de Medicina Integrativa en Orlando Health, Diane Robinson, explica que el factor crucial es la relación sicológica con la comida y el ejercicio, sin embargo, el 60% de los encuestados dijeron que la dieta y el ejercicio son las mayores barreras para la pérdida de peso, mientras que solamente el 10% dijo que el bienestar mental es la mayor dificultad.
Esto no sólo repercute en que las dietas fallen, sino que además provoca que quienes logran perder el peso deseado, lo recuperan rápidamente.
Robinson explica que esto último no es ninguna sorpresa. "La mayoría de la gente se centra casi exclusivamente en los aspectos físicos de la pérdida de peso, como la dieta y el ejercicio. Pero hay un componente emocional de los alimentos que la gran mayoría de la gente simplemente pasar por alto y puede sabotear rápidamente sus esfuerzos", dijo la experta.
Los números
La encuesta consultó a más de mil estadounidenses, de los que el 31%, aseveró que la mayor dificultad para bajar de peso es el ejercicio, seguido por un 26% que afirmó que es la alimentación, mientras que un 17% dijo que es el costo que implica llegar un estilo de vida saludable. En tanto, un 12% respondió que es la cantidad de tiempo que hay que comprometer en esa causa.
Sin embargo, sólo uno de cada 10 consultados dijo que lo emocional era una barrera para bajar de peso. "Eso podría explicar por qué muchos de nosotros luchamos", dijo Robinson. "Con el fin de perder peso y mantenerse en forma a largo plazo, tenemos que hacer algo más que pensar en lo que comemos, también tenemos que entender por qué estamos comiendo", añadió.
"Estemos conscientes o no, estamos condicionados a usar la comida no sólo para alimentarnos sino también como consuelo", dijo la experta. "Esto no es algo malo, siempre que lo reconozcamos y lidiemos con eso apropiadamente", agregó.
Cada vez que el cerebro experimenta placer, libera dopamina. El problema es cuando eso sucede con la comida y ésta se transforma en una recompensa, porque puede tener consecuencias negativas, destaca Robinson.
Para evitar verse dominado por las emociones, la experta recomienda: mantener un registro diario de las comidas y los estados de ánimo, para poder detectar patrones; identificar los alimentos que lo hacen sentir bien y explicarse por qué los come, a qué recuerdos los asocia; antes de comer preguntarse si se hace por hambre o por otro motivo. La idea es estar más consciente a la hora de alimentarse.
Buscar ayuda emocional
La líder del estudio, la neuropsicóloga Diane Robinson, explicó que tal como las personas buscan la asistencia de un experto para comenzar a practicar ejercicio, matriculándose en un gimnasio por ejemplo, también deberían hacerse supervisar por un experto para hacerse cargo del lado emocional de la comida. "Si conseguir que su cuerpo esté en forma es algo que no ha logrado todavía, quizás esta vez se inicia con la mente", destaca la experta.