Leonardo Yevenes Ch.
Aguantando el frío y fuertes vientos que corren en las áreas rurales de la comuna de Punta Arenas, Jorge Carrasco, ingeniero agrónomo de 56 años del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (Inia) de la Región de O'Higgins, tiene una ocupada agenda de trabajo donde habitualmente se encuentra recorriendo gran parte del país.
Desde 2009 a la fecha, Jorge prácticamente no ha dejado de trabajar en los múltiples proyectos de captación de aguas lluvias que se extienden desde la sexta región al sur, proyectos que se generaron desde su propia autoría y en los que se utiliza el mismo techo de las viviendas o bodegas de cada agricultor interesado en instalarlo, para recoger, canalizar y almacenar en estanques las precipitaciones que caen en cada lugar donde se instala esta tecnología y donde Osorno no ha estado exento del uso de este sistema.
Sin ir más lejos y gracias a la idea iniciada por el "cosechador de lluvias", el año pasado ya se concretaron alrededor 10 proyectos en la provincia.
Las iniciativas se están extendiendo a través de todo el país y en el futuro próximo se multiplicarán en nuestra zona ante el recién anunciado Plan de Riego Regional dado a conocer la primera semana de noviembre por el propio ministro de Agricultura, Carlos Furche, a modo de hacer frente a las inestabilidades del clima y de las cada vez más extensas sequías que se viven en el país.
-¿Cómo surgió la idea de instalar este sistema en el país?
-Ocurrió cuando realizaba estudios de postgrado en la Universidad Politécnica de Madrid (hace 10 años) donde tenía un compañero brasileño que vivía al noreste del país y trabajaba en un proyecto similar en el lugar en el que residía, donde llovía muy poco (menos de 400 milímetros por año) y aprovechaban de recolectar agua de este modo.
Cuando comenzaron a registrarse los problemas en el secano de Chile con la escasez del agua, pensamos que este sistema podría aportar en la falta de agua para la zona central, pero luego se fue extendiendo a la zona sur.
En Brasil el sistema estaba totalmente implementado, pero con características diferentes al que instalamos en Chile. Por poner un ejemplo, allá los estanques no estaban preparados para soportar un sismo.
-¿Qué significa en cantidad almacenar aguas lluvias utilizando algo tan simple como un techo?
-Quiere decir que con un milímetro de agua caída en un espacio de un metro cuadrado, ya puedes almacenar un litro de agua. Esa es la medición que hacemos.
Las precipitaciones siempre están disponibles al igual que las superficies para captar el agua, ya que es algo tan simple como el techo de una casa o de una bodega.
-¿Para qué puede ser utilizada esta agua?
-En general se usa para el riego de hortalizas, para los invernaderos, para los cultivos de riego por goteo, pero también se da el caso de ser usado para consumo humano (siempre que esté hervida) o para temas domésticos como lavar la loza.
Beneficiados
-¿La idea está siendo aplicada sólo por el Inia actualmente?
-No, también está siendo utilizada por el Indap y los programas de desarrollo local que tiene cada comuna, donde afortunadamente han sido muy bien recibidos y se ha ido desarrollando un intenso trabajo desde que comenzó a aplicarse por primera vez en 2009 en la Región de O'Higgins. Hay actualmente más de 600 personas utilizando el sistema con buenos resultados.
-¿Es una tecnología cara o de fácil acceso?
-Todo el sistema que implica la captación, acumulación y aprovechamiento de aguas lluvias en invernadero tiene un costo que se estima en un millón 300 mil pesos.
Ahora si piensas que contrario a ese costo tuvieras que esperar que un camión municipal te fuera a repartir agua, te das cuenta del beneficio. En todo caso, los diferentes programas agrícolas están implementando este sistema con un costo muy menor.
-¿ A quiénes favorece el sistema?
-A todas aquellas pequeñas familias o comunidades que están aisladas o en áreas donde no es tan fácil llegar.
Es el caso de gente como el que tuvimos durante el verano recién pasado. Personas que viven en pequeños islotes de Chiloé donde les tuvieron que llevar agua en barcazas, imagínate eso.
En cambio con este sistema puedes utilizar estanques de almacenamiento de 5, 10 y hasta 15 mil litros. Y eso no es todo, porque si el usuario desea adquirir otro estanque además del que estamos instalando, el agricultor puede aumentar notablemente su almacenamiento y, por ende, la superficie a regar.
-¿Le parece que esta es la solución más eficaz para la falta de agua de los pequeños agricultores de esta zona?
-Sí, porque ha permitido entregar una solución para aquellos que trabajan a una escala menor y así lo hemos comprobado al ver a familias contentas con este sistema que les está resolviendo el problema de la falta de agua. Todo, gracias a una instalación que no lleva más de tres días en ser instalada por tres personas.
Datos
El riego de hortalizas e invernaderos es el uso más frecuente para este tipo de sistema de cosecha de lluvias.
En el lavado de ropa y otros usos similares también se puede ocupar el agua captada por el sistema. En cuanto a consumo humano, debe ser hervida.
2009 fue el año en que se instaló por primera vez el "cosechador" de lluvias en la Región de O'Higgins.
entrevista. Jorge carrasco , ingeniero agrónomo de Inia de la Región de O'Higgins e inventor de las "cosechas" de lluvias: