Bosques y riesgos medioambientales
"Las plantaciones tienen efectos en los suelos, en los recursos hídricos y en la producción agrícola".
Si bien la producción de madera es un negocio que mueve aproximadamente 6 mil millones de dólares y es una de las industrias más dinámicas en Chile (3% del PIB y segundo producto de exportación; crecimiento de 300.000 a 2,7 millones de hectáreas plantadas entre los años 1974 y 2013), tiene efectos socioeconómicos y en los ecosistemas que aumentan los riesgos medioambientales. Recientemente, una investigación sobre plantaciones en 180 comunas del país en una de las revistas científicas más prestigiosas del mundo (K. Andersson et al, More Trees, More Poverty? The Socioeconomic Effects of Tree Plantations in Chile, 2001-2011, Environmental Management, 2015) demuestra que la expansión de las plantaciones ha favorecido la vulnerabilidad social en Chile, es decir, a mayor expansión de las plantaciones forestales, mayor es la tasa de pobreza en las comunas. Asimismo, combinadas con el cambio climático, las plantaciones tienen efectos en los suelos, en los recursos hídricos y en la producción agrícola, y no generan suficientes fuentes de empleo para compensar esas externalidades negativas.
En la actualidad, los procesos de certificación internacional consideran los efectos negativos de la producción forestal tanto para la sociedad como para el medio ambiente. Por otra parte, la Estrategia de Desarrollo Regional de Los Lagos 2010-2020 declara que las sequías y los incendios forestales junto a otros riesgos medioambientales justifican una planificación participativa y con enfoque territorial. Por lo tanto, la sociedad y las instituciones locales de los lugares donde se encuentran las plantaciones debiesen de disponer de mayor información sobre los efectos de esas industrias en sus territorios, para así poder tener una participación activa en la planificación territorial y el cuidado del medio ambiente.
Si los municipios asumen una actitud proactiva para proteger los intereses territoriales y el medio ambiente, integrando la participación social y coordinando sus acciones con otras instancias regionales y nacionales, tales como Conaf y el Ministerio del Medio Ambiente, cumplirán un importante papel para fortalecer a las comunas y prepararlas mejor para enfrentar desafíos medioambientales y sociales que son el resultado de las actividades productivas y el cambio climático.
Dr. Patricio Valdivieso, CEDER, Universidad de Los Lagos