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N o sólo gastronomía criolla, música y bailes hubo en el Recinto Sago durante los cuatro días de festejos patrios de este año, sino también diversas entretenciones pensadas para los más pequeños, como juegos populares, como el palo ensebado y las carreras de sacos, juegos acuáticos, de esferas, entre otros. Pero también los menores disfrutaron encumbrando los tradiciones volantines y por supuesto, como buena celebración dieciochera osornina, tirando challas a los asistentes al recinto. Y para no quedar atrás con la celebración, los comerciantes de los puestos de alimentos ofrecieron terremotos sin alcohol, preparados con bebida, granadina y helado, ideales para los "abstemios" y los niños. Así, desde pequeños viven el espíritu patriótico.