A sus 14 años, el estudiante del Colegio Creación Felipe Orellana muestra unas capacidades técnicas depuradas con el balón. Así lo demostró hace un par de semanas en el Campeonato de Fútbol Copa Mandarina que organizó su club Osorno Junior en el estadio Alberto Allaire.
Hay mucho trabajo de por medio bajo el mando del técnico Mauricio Sanz, pero también porque la pasión por el fútbol corre por sus venas, motivado por la experiencia y el talento de su padre Juan Ramón "Cachete" Orellana.
Felipe es el hijo mayor del ex volante de Provincial Osorno, Cobreloa y Antofagasta, entre otros, y juega por su colegio y también por esta escuela de fútbol que funciona en el recinto rahuino.
"Desde chico que me gusta el fútbol, motivado sobre todo por mi papá. Además jugamos en la misma posición ya que soy volante de creación y por lo que he visto tenemos algunas cosas parecidas en el juego", explicó el joven valor de Osorno Junior.
Y como era de esperarse, admitió que siempre su ídolo ha sido su papá, por lo que a futuro le gustaría convertirse en jugador profesional pero para ello debe ir paso a paso, seguir aprendiendo de los consejos tanto de su técnico como de su padre.
Debido a que era pequeño cuando fue la época dorada del "Cachete grande", confiesa que "por internet a veces veo algunos partidos donde jugaba mi papá para ver qué tal lo hacía, sus jugadas y goles. Cuando era profesional yo era más chico, por eso no me acuerdo mucho, pero por suerte ahora uno puede encontrar información".
ORGULLOSO
El ex volante taurino Juan Ramón Orellana se mostró orgulloso por el talento de su hijo, más aún porque juega en la misma posición y se ve reflejado en la época que se inició en el fútbol.
"Felipe se quiere dedicar al fútbol cuando sea grande y yo lo apoyo en todo. Además uno siempre quiere que los hijos sean mejor que uno y como yo conozco el ambiente lo aconsejo para que haga las cosas bien", dijo el ex cerebro de los Toros.
Sobre las similitudes que tiene con su hijo, "Cachete" dijo que tiene muy buena pegada, traslado de balón, maneja los tiempos y es buen habilitador.
"Tiene que adaptarse al fútbol de ahora que es más rápido que antes, pero tiene todas las condiciones para llegar al profesionalismo si se lo propone", comentó.
Eso sí, dijo que Felipe debe buscarse las oportunidades porque Osorno ya no es una vitrina del fútbol joven tras el alejamiento del conjunto taurino del profesionalismo, pues ya no juega bajo el alero de la Anfp.
"Es una lástima que no haya competencia como la que había antes, pero ese debe ser una motivación extra para buscar su espacio", cerró el patriarca de los Orellana, que aprovechó de tirarle las orejas a su hijo Felipe para que suba sus notas.